El regreso del delantero chileno representa no solo un regreso a sus raíces futbolísticas en Europa, sino que también una apuesta por revitalizar al equipo que viene de escaparse por poco del descenso.
Alexis Sánchez finalmente fue presentado esta semana como el nuevo refuerzo del Udinese de Italia, recibiendo una afectuosa bienvenida de los hinchas, dirigentes y el plantel del equipo Friulani.
Durante sus rondas de conversaciones por su retorno, Sánchez expresó su alegría por regresar al equipo en donde jugó entre 2008 y 2011, explicando que una de las principales motivaciones para su retorno fue que: “Udinese luchó mucho por tenerme y por eso no dudé en volver”.
Asimismo, Sánchez enfatizó su deseo de lograr grandes cosas con el equipo que en la temporada anterior estuvo en la parte baja de la tabla. “¿Por qué no soñar en grande? Cuando llegué a Inter, el club llevaba 11 años sin ganar, pero logramos hacer grandes cosas juntos. Me gusta luchar en la vida”, destacó el delantero chileno.
Y aunque tuvo otras ofertas, tanto en Sudamérica como en Italia, Alexis decidió regresar a Udinese porque se siente como en casa y busca ser feliz. “Regresé porque soy un hincha del Udinese, mi primer equipo fuera de Chile”, remarcó.
En ese escenario, Alexis reconoció que aún no está en su mejor forma física, pero está trabajando para alcanzar su máximo rendimiento. “Mi objetivo es encontrar la mejor forma física posible. Estoy listo para dar mi contribución al equipo,” mencionó.
Sánchez también tuvo palabras de apoyo para su compatriota Damián Pizarro, describiéndolo como “un diamante en bruto” que necesita seguir creciendo y adaptarse de la mano de su trabajo en Udinese.