El jugador fue la figura de Quintero Unido el año pasado en Tercera B, pero a inicios de 2020 optó por emigrar a esta isla escondida en el sudeste asiático. "Es difícil estar tan lejos de mi familia, pero este sueño no me lo quita nadie", dice.
Para llegar de Chile a Timor Oriental usted tiene que tomar un avión a Europa o Estados Unidos, desde ahí a Japón, luego a Singapur o Indonesia y ahí recién llegará a Dili, capital del país lejano a 14.756 kilómetros de esta tierra sísmica. Ahí hace patria un chileno: Allan Manzo.
Este volante ofensivo subió con Quintero Unido la temporada pasada en Tercera B. Eso lo vio otro chileno, Simón Elissetche, técnico del Lalenok United, actual campeón de esa liga asiática, quien convenció al formado en Everton de irse a esta isla en el sudeste del continente, donde el Covid-19 está erradicado.
Si, porque en el país sólo hubo 27 casos del bicho maldito y la vida ahora es de lo más normal, cuenta Manzo. "Acá se cerró todo, por eso también regresó el fútbol. El retorno ha sido positivo para nosotros. Mucha gente está yendo a los partidos, teníamos ganas de comenzar a jugar y como no hay casos, si existe la normalidad".
Junto a su equipo arrancaron bien la temporada, llevan tres triunfos en mismo número de partidos, algo que para Allan "ha sido positivo, porque desde febrero veníamos trabajando para esto. Me he adaptado súper bien, me estoy ganando un cupo en el equipo, pese al clima que es muy duro. Pero estoy contento", indica.
El 18 fuera de casa
Y como en estas fechas aflora el sentimentalismo, Manzo tuvo que hacer lazos allá y se encontró que otros chilenos también viven en Timor, así se juntaron para las fiestas patrias, llevando un poquito de Chile a la tierra tetún.
"Esta fecha la verdad es que me trae mucha nostalgia, no estar cerca de mi gente es difícil. A todos los chilenos nos gusta el 18, estamos acostumbrado al asado, la empanada, el mote con huesillos, bailar una cueca bien zapateada, es difícil estar tan lejos, se extraña la comida, pero acá hay unos chilenos una pareja y una hija con ellos nos quedamos de juntar para celebrar el 18. Es duro estar lejos, pero siempre con el objetivo claro y la mente puesta en hacerlo bien en la cancha", añade.
Según el ranking FIFA, este país de paradisíacas playas es la 196° del mundo, su liga no figura en las mediciones de competencias de primera división, pero aún así Manzo enfatiza que "es muy duro el ambiente acá, a la gente le gusta el fútbol y nuestro club tiene buenos seguidores. Ahora el torneo es formato copa, dura hasta el próximo mes, yo tengo contrato hasta el 1 de enero y si me quedo habrá que pensar en la Champions asiática y los tres torneos locales".
- ¿Cómo fue su debut?
Soñado porque fue el mismo día que nació mi primera hija. A veces se vuelve difícil porque uno tiene ganas de estar con su mujer, de recibir a mi niña, ver sus primeros llantos, pero ella es la fortaleza que tengo, sé que ella va a entender todo lo que hice por ella para seguir adelante.