Deportivo Lara recibió a Corinthians por Copa Libertadores, donde sucedió un increíble hecho: Luis Curiel, el arquero local, recibió restos de vidrios luego que su propia hinchada lanzara una botella al arco donde se encontraba.
Sucedió a los 30 minutos, cuando el partido ya iba 1-0 a favor de los brasileños teniendo un penal a favor.
Jadson estaba acomodando la pelotita cuando el árbitro se acercó a Curiel. Fue en ese momento que los hinchas locales aprovecharon para lanzar el proyectil en dirección hacia el saquero, el cual impactó en el travesaño. Fue ahí cuando el portero sintió los restos de vidrios en su cabeza.
Inmediatamente el cuerpo médico entró a curar a Curiel, quien al rato sufrió una dolorosa derrota recibiendo siete goles de los paulistas.
Triplete de Jadson, dos más de Dutra, Sidcley y Romero completaron la faena en Venezuela, mientras que Reyes y Hernández anotaron los del honor en el 7-2 final.