Es sabido que Japón es la cuna de los dibujos animados, y en el Mundial ruso los asiáticos han hecho alusión en más de una vez a los "Supercampeones", serie futbolera con la que niños de todo el mundo disfrutaron con las hazañas de Oliver Atom.
Por lo mismo, ayer sorprendió la bandera gigante de los japoneses en el duelo de octavos de final ante Bélgica, donde el protagonista de la serie animada levantaba la Copa del Mundo.
¿Mufa? Tal vez, pero hasta el 2-0 parcial muchos ya le hacían reverencia a Oliver Atom. Es que también había un antecedente en los nipones, ya que en el pasado partido ante Polonia, los azules dieron la vuelta al mundo con la técnica "Jaula de pájaro", la misma que ocupaban el los dibujos animados al tocar el balón hacia el lado y no atacar hasta que finalizara el partido.
Pero lo cierto es que en la cancha, los asiáticos se quedaron con las manos vacías, lo que lamentó su DT, Akira Nishino. "No esperábamos este final tan duro. Teníamos el partido controlado, estaba bien el equipo y concedimos un gol inesperado", señaló.
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