Falta de roce internacional. Poca competencia. Semiprofesionales. Sin dinero para pagar entrenadores. Trabajo remunerado en otras partes. Equipamiento de mala calidad...
Es duro ser deportista de alto rendimiento en Chile. Lo que da el gobierno no alcanza y, desde hace años, se han buscado fórmulas para paliar esta carencia. Para eso se creó el Plan ADO del Comité Olímpico de Chile y que hoy tiene un nombre más marketero y, de paso, mucho más cercano: el Team Chile.
Y vaya que ha habido progreso. No por nada, se logró este año una actuación histórica en los Juegos Suramericanos de Cochabamba, con 132 medallas. Bien. Pero falta, vaya que falta...
Sin embargo, bastó que a un "genio" se le ocurriera formular una invitación. Se la extendieron al empresario y filántropo Andrónico Luksic, a quien le pidieron ser socio del Team Chile. Y aceptó. El 28 de julio, con foto incluída y abrazos, oficializó su aporte económico.
Lo de Luksic no quedó ahí, ya que él planteó una estrategia en Twitter, la misma red social que le ha permitido al dueño de Canal 13 canalizar sus aportes no sólo a decenas de deportistas, sino que también en áreas como educación, salud y emprendimiento.
"Yo invito a @bernardolarrain a hacerse socio y así comenzar una cadena para que muchos chilenos más apoyemos a nuestros deportistas olímpicos!!", puso Luksic Craig en su seguida cuenta.
Y así, como si se tratara del juego de las "quemaditas" o la "pinta", se inició una campaña que va creciendo día a día. Fue así que Larraín (director de Colbún) aceptó y "quemó" a Jorge Errázuriz (millonario liberal), éste lo hizo con Alejandra Mustakis (fundadora de diversas compañías), ella con Juan Yarur y el socialité "pintó" a Lucy Ana Avilés (la misma que facilitó el famoso Supertanker), quien aceptó el desafío, pero que aún no le pasa la pelota a alguien (como que no entendió el juego).
¿Importa?
Y vaya que importa. Es que eso que les escribimos en el primer párrafo puede pasar a ser sólo un mal recuerdo, pues todo incremento en los aportes va en directo beneficio de los deportistas.
Con más recursos se pueden financiar más y mejores preparaciones en el extranjero, viajar a más competencias internacionales, contratar más head coaches, proyectar más deportistas jóvenes, etc.
La cadena de favores ha comenzado...
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