Universidad de Concepción sumó un triunfo de oro ante los quillotanos y aseguró su participación en la Copa Libertadores. FAdemás los sureños podrían forzar una final con la Católica.
Con la misión y obligación de llegar hasta la última fecha peleando por el título, Universidad de Concepción salió al pasto del Ester Roa con hambre de triunfo y eso rápidamente se vio reflejado en el marcador.
Si bien el rival de turno era San Luis, que se jugaba la última chance matemática de zafar del descenso a Primera B si es que lograba ganar por goleada, el elenco dirigido por Francisco Bozán no tuvo piedad y gracias a un zapatazo de Walter Ponce se puso en ventaja antes de cumplir dos minutos de juego.
Ese ímpetu en el Campanil no paró y siguieron acechando el arco defendido por Ignacio González. A los 19' y luego de un contragolpe penquista, el portero canario salió del área y metió una mano tras un globito de José Huentelaf y se fue expulsado.
Con un jugador menos, San Luis buscó el empate con más ganas que fútbol, pero nuevamente se encontró con otro baldazo de agua fría en sus espaldas a un suspiro del fin de la primera etapa.
Tras un certero centro de Héctor Berrios, el volante Francisco Portillo se elevó sobre Gustavo Mencia y clavó un precioso cabezazo dentro del arco del arquero Nelson Espinoza.
Con el 2-0 a favor, Bozán le puso paños fríos al encuentro y privilegió la posesión.
La expulsión de Walter Ponce a los 60' solo sirvió para adornar las estadísticas, ya que San Luis no logró levantar cabeza ni anotar un gol en el partido que los condenó al descenso a Primera B.
Con este triunfo, la UdeC llegó a los 55 puntos y matemáticamente se convirtió en el único equipo que puede ahogar el grito de campeón de Universidad Católica (58). Aunque para ello tendría que derrotar a Colo Colo de visita y esperar que Temuco derrote a la UC en el sur. Si se dan dichos resultados irían a un partido de definición.
Eso sin contar que aseguraron un cupo en la próxima edición de la Copa Libertadores, la que sería la tercera en toda su historia.
"Lo primordial era seguir haciéndose fuerte de local. De entrada abrimos el marcador y supimos mantenerlo. Para un equipo como nosotros, es un orgullo vestir esta camiseta y seguimos peleando el título hasta el final", declaró Alejandro Camargo.
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