El "D10S" argentino fue presentado como el técnico de Gimnasia a estadio lleno, desatando la locura en la ciudad de La Plata.
Quien no creía que Diego Armando Maradona es "D10s" en Argentina, tras ver su presentación como nuevo entrenador de Gimnasia de La Plata, probablemente ya se convenció. De manera racional, es imposible explicar el fanatismo que despierta el "Pelusa" al otro lado de la cordillera.
"Es verdad que el Diego es lo más grande que hay. Es nuestra religión, nuestra identidad", reza una canción de Los Ratones Paranoicos, que describe perfectamente la escena.
"Maradó" pisó la cancha del estadio El Bosque y las 20 mil personas que llenaron las tribunas explotaron en histeria por ver al campeón del mundo con los colores del equipo platense. Los cánticos de "Diego, Diego" retumbaban.
Los evidentes problemas físicos que lo aquejan, poco le importaron a la dirigencia a la hora de contratarlo. De hecho, para que llegará al círculo central de la cancha, debió usar un carrito de golf, en donde hasta el chofer le pidió un autógrafo. Locura total, mientras una que otra lágrima afloraba en el ex Napoli.
"Vamos a trabar con la cabeza y les pido a los jugadores que se maten por esta gente. El jugador que no corre, no juega. El equipo que venga a jugarnos, se tendrá que matar", le dijo a la gente, que por un momento se olvidó que el club pelea el descenso, porque con el Diego ya se sienten campeones.
El debut en el "Lobo", será el próximo domingo ante el Racing de los chilenos Marcelo Díaz, Eugenio Mena y Gabriel Arias.