El delantero nacional anotó el agónico empate para su equipo pero no pudo abrazar a sus compañeros.
El fútbol está suspendido en gran parte del mundo, pero en Costa Rica un chileno no se detiene y hoy tuvo la ocasión de festejar.
Se trata de Carlos Soza, quien durante esta jornada marcó el empate en los descuentos del partido entre el Jicaral, su equipo, y el Municipal Grecia.
Su gol, pese a lo importante que es rescatar un punto a última hora, estuvo carente de gritos y abrazos. ¿El motivo? El distanciamiento social, que cuesta en el fútbol, pero se puede evitar a la hora de celebrar un gol.
El delantero chileno, que hoy cumple funciones de volante, comentó a La Cuarta que "la orden era que el gol no lo celebráramos, que nadie abrazara a nadie porque nos cobran multa, por eso nadie se acercó".
Este es su primer gol en el Jicaral, que se ubica en la parte alta de la liga de Costa Rica y volverá a jugar el martes.
Temas Relacionados
