Si todo sale a pedir de boca, como piensan en Quilín, el flamante torneo se disputaría desde enero. Ojo que vuelven los playoffs.
De un tiempo a esta parte, algo se sabía acerca de un torneo que preparaba la ANFP para aprovechar el tiempo perdido en los primeros meses del año. Pero no había mucha información más allá de las intenciones de Pablo Milad.
Eso cambió en las últimas horas, al punto de que este viernes en las oficinas de Quilín habrá una reunión que podría confirmar el certamen que, de una u otra forma, resulta nostálgico: la Copa de Primera, como se llamó a la nueva competición, trae de regreso al fútbol chileno los playoffs.
Los detalles, a continuación:
El torneo está reservado para los clubes de Primera División. Es decir, habrá dieciséis participantes, que se dividirán en cuatro grupos con cuatro equipos cada uno.
En cada grupo habrá un cabeza de serie, y se enfrentarán entre ellos en encuentros de ida y vuelta. Los dos primeros de cada sector accederán a la siguiente fase de eliminación.
Desde cuartos de final, los clásicos playoffs: muere-muere en partidos únicos hasta llegar a la final, que se disputaría en principio en el Estadio Nacional.
La planificación de Milad y compañía contempla que en Chile se jueguen muchos más partidos que en la actualidad, de modo que la Copa de Primera les asegura un mínimo de seis partidos a los clubes y un máximo de once a quienes lleguen a la instancia decisiva.
Los grupos serán sorteados, y en el caso de los cabeza de series, esos lugares serían ocupados por los primeros cuatro puestos de la pasada campaña, es decir, Cobresal, Huachipato, Colo Colo y Palestino.
¿Cuándo comienza?
El ambicioso proyecto de la ANFP tendría como fecha para su inicio fines de enero, con el objeto de que la fase de grupos ya esté completa a mediados de febrero. ¿Los problemas que podría suscitar? El choque de fechas con el Preolímpico sub 23 de La Roja, o los compromisos internacionales de los clubes que se clasificaron a las rondas previas de Libertadores y Sudamericana.
Premios
En cuanto a los premios, según recoge La Tercera, la idea es que haya un piso de 30 millones de pesos por participar más otros 20 millones por superar la fase de grupos. Con bonos por 30 millones por pasar a la semifinal, 30 más por llegar a la final y 50 para el campeón, el primer campeón de la Copa de Primera se llevaría un premio total de 160 millones de pesos.
Para financiar esos gastos, en Quilín pretenden licitar los derechos televisivos, aunque claro que dándole prioridad a TNT Sports.
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