El delantero chileno no contuvo las lágrimas durante una íntima entrevista que le hicieron en el América, su actual club.
El 4 de julio quedará por siempre marcado en la vida de Nicolás Castillo. Así nomás, pues ese día el delantero del América de México regresó a las canchas en un duelo amistoso disputado en Gringolandia ante el Santos Laguna. Esto, tras sufrir una rotura de tendón en el recto femoral del muslo derecho, y posteriormente batallar con una trombosis que lo tuvo al borde no sólo del retiro, sino también de la muerte.
Y este miércoles, el jugador formado en Universidad Católica se confesó en una extensa entrevista con el club cuate, en la cual recordó el complejo momento que atravesó.
"Desde que me subí al bus camino al estadio, iba pensando todo momento en todo lo que viví, el momento en que estuve en el hospital con la incertidumbre de saber qué iba a pasar conmigo. Fueron muchas operaciones de urgencia y no sabía si iba a vivir o si iba poder tener mi pierna, fueron muchas sensaciones que hoy en día agradezco a los que estuvieron cerca, en mi familia, todos trabajando para que pueda estar aquí hoy día", reveló emocionado el Nico.
Y sobre la mismas agregó: "recuerdo momentos que estuve en casa sin poder hacer muchas cosas, mi familia me ayudó. A la gente del club que siempre estuvo cerca de mí. Nunca me dejaron solo. Amis compañeros. eE primer día que volví de vuelta de todas las cirugías me recibieron súper bien, me abrazaron, sentí ese cariño y hoy en día estar aquí en una cancha… demostrándole a mucha gente que, cuando te digan que no, que no puedes, que no lo vas a hacer. Yo soy así, O sea, a mi cuando me dicen algo que no y haré todo lo posible para que sea que sí".
La emoción de Nicolás Castillo
Además, Castillo se refirió a la incertidumbre que hubo en su momento con su futuro en el fútbol. "Muy poca gente creyó que volvería a jugar y aquí estoy. Dejándolo todo. Lo dejé todo en la recuperación, hubo muchas lágrimas, muchas peleas conmigo, con gente del club, que hoy agradezco porque por ellos hoy estoy aquí. Son momentos que se te vienen a la cabeza, pero lo más importante es la familia, que me aguantó en las peores", reveló.
"El 4 de julio lo voy a recordar el resto de mi vida. Me hubiese encantado haber salido a la cancha y tener a mi familia cerca y abrazarla. A mi hijo (…) Volver a jugar, a pisar una cancha, que la gente te grite, fue un debut… Lo viví así, tenía mucho nervio de qué iba a pasar. Ahora solamente me toca disfrutar, es el primer paso. Hoy me toca ponerme a punto en todo lo perdí. Perdí casi un año y medio. Quiero volver a ser el que fui", remató.
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