Fernanda Leiva, DT de Quinta Normal en la Copa Enel, apunta con su trabajo más allá de lo netamente deportivo, y se alínea con el espíritu del torneo.
Hay para quienes el fútbol es mucho más que competencia o la búsqueda del resultado como sinónimo de éxito.
Es el caso de Fernanda Leiva, la joven directora técnica del equipo de varones de Quinta Normal en la Copa Enel, quien ve en este deporte la forma de ayudar a niños y niñas en condiciones de vulnerabilidad a través de la escuela de fútbol del club Simón Bolivar, en la población del mismo nombre.
Junto a su pareja hace cinco años partieron con un taller de fútbol de verano que de 6 niños, incluyendo algunos de su familia, pasó a ser una escuela con más de 150 menores, autogestionada y con algunas ayudas extras, la que pese a tener una baja mensualidad, actualmente cuenta con el 30% de sus alumnos becados, para darles la oportunidad.
"Lo hago porque me apasiona el fútbol y para apoyar a niños en contextos de vulnerabilidad", comenta Fernanda, también estudiante de educador social infanto-juvenil, quien cuenta que llegó al fútbol gracias a que acompañaba a sus hermanos menores a practicar este deporte, porque en su familia, dominada por mujeres, a nadie le interesaba.
Hoy, ella dirige las ilusiones de un grupo de niños, entre ellos su hermano, que sueña con encumbrarse en el torneo y, por qué no, llegar a la definición del título a fines de noviembre en Concepción, junto a los ganadores de Maule, Calama y el Bío Bío. "Jugar la Copa Enel es como llevar el estandarte de la comuna", apunta.
Al respecto comenta que la Copa Enel tiene un significado especial para ella, porque está en la misma línea de su forma de entender la actividad. "El motor de funcionamiento de la Copa Enel es un poco reinsertar a los muchachos que están en contextos vulnerables al deporte, resignificar algunos lazos, algunos valores mediante el deporte, lo mismo que buscamos nosotros replicar en nuestra escuela y que nos ha funcionado a la perfección".
Y aunque los éxitos deportivos siempre son bienvenidos, sus expectativas van más allá de lo netamente deportivo: "Mi principal meta es plantear un proyecto socio deportivo que permita incluir a todos los niños y niñas mediante el deporte, no sólo el fútbol, que logre resignificar valores, unir los lazos familiares, potenciar las habilidades parentales de las familias porque muchos niños están solos, que es algo de lo que nos hemos dado cuenta en estos años. Mi meta es potenciar un proyecto social".
Santiago definió clasificados a segunda ronda
Tras la disputa de la fase grupal, el pasado fin de semana se definieron los 16 equipos de hombres y los 16 de mujeres que clasificaron a la segunda ronda de la sede metropolitana de la Copa Enel.
Mañana se realizará el sorteo para armar las parejas que se medirán en octavos de final. Desde ahora serán partidos de eliminación directa hasta dar con los campeones en cada categoría, los que representarán a la capital en la semi nacional del 23 de noviembre en Concepción (al día siguiente será la Gran Final).
Algunas comunas lograron clasificar a sus equipos de damas y varones. Ellas fueron Santiago, Conchalí, La Cisterna, Lo Espejo, Lo Prado, Lo Barnechea, Recoleta, Huechuraba, Independencia, Colina, Quinta Normal y Cerro Navia.
Entre las damas, las campeonas vigentes de Independencia y Santiago, con 39 y 36 goles, respectivamente, fueron las más goleadoras y asoman como favoritas de cara al título, además de Conchalí.
En varones, el equipo más efectivo fue Quinta Normal con 27 tantos, seguido por los actuales campeones de Independencia y la sorpresa, Colina, con 21 anotaciones cada uno.
Los goleadores de primera fase fueron Josefa Muñoz del equipo de Santiago, con 17 goles, y Luckas Gauthier, de Quinta Normal, con 10.