Los cinco imputados quedaron con medidas cautelares, que también prohíbe que se acerquen a la víctima Felipe De Pablo, que seguirá con protección policial.
Cinco barristas de la Universidad de Chile fueron detenidos por las amenazas al gerente general de Azul Azul, Felipe De Pablo, por parte del OS9 de carabineros.
Por este motivo, fueron imputados por los delitos de amenazas y daños calificados, aunque el juez determinó no dejarlos en prisión.
"Como se pudo ver en la audiencia, el Ministerio Público estaba interesado en la medida cautelar de prisión preventiva respecto de los imputados, algo que se visualizaba difícil en un primer momento, donde el magistrado estimó que no estaban o no eran de la envergadura por la 'Ley de violencia en los estadios'", comentó la fiscal, Lorena Herrera, de la Fiscalía Sur.
En ese sentido, sí se decretaron medidas cautelares para que los imputados no se acerquen a la víctima ni a su familia.
"Se les impuso la medida cautelar de prohibición de acercarse a la víctima, su domicilio y el de su familia, donde ocurrieron los hechos, también se les prohibe a los imputados concurrir a los partidos donde juegue la Universidad de Chile, como mecanismo de protección".