Felipe Peñaloza y Antonio Cabrera lograron al quinta medalla dorada para Chile en el ciclismo Madison. Hace unas semanas estuvieron a punto de no ir a Lima por una acusación de dopaje.
Otra vez el ciclismo hace que Chile vuelva a tocar la gloria panamericana. En la prueba Madison la dupla nacional comandada por Antonio Cabrera y Felipe Peñaloza vencieron a Estados Unidos (85) y Colombia (61) para lograr los 88 puntos necesarios colgándose el oro, el primero en esta especialidad desde Río 2007.
Eso sí, la victoria no fue fácil, ya que los atletas tuvieron que soportar un accidente en el inicio de la competencia, del cual lograron reponerse rápidamente.
Fue una prueba donde los integrantes del Team Chile lograron mantener la presión ante la presión de sus rivales. Claro, porque antes de llegar a las 50 vueltas, de un total de 200, los criollos ya habían tomado el primer lugar, fue ahí, que el gran trabajo de ambos logró dosificar las cargas para guardarse lo mejor para el final.
En los últimos 20 giros, el trajín de Cabrera y Peñaloza fue endemoniado. Los ciclistas rivales intentaban hacer el peso, pero la buena cuenta de ahorro que había logrado Chile hizo que la diferencia fuese inalcanzable.
Con la vuelta 200 vino el llanto y la alegría del binomio local, que se acercó a su equipo para soltar toda la tensión de la compleja prueba, que le entregó la quinta presea dorada al Team Chile.
El más emocionado era Felipe Peñaloza, o más conocido como "Freddie Mercury". Ese bigote no pasa desapercibido en el velódromo, que ha visto como el chileno se ha convertido en la principal figura de Lima 2019, tras conseguir el bronce en la persecución y ahora este oro, pero todo con un carga especial después junto a Cabrera cargarán con una acusación de dopaje, a raíz de dosis de testosterona encontradas en su equipaje.
"Nos tomó súper mal ese tema. Estuvimos una semana sin entrenar, tuve depresión, no queríamos venir a los juegos", contó el bigote, que finalmente calló bocas.
Cual artista, Peñaloza resaltó en el ovalo con el mostacho, su fiel casco celeste y el ímpetu que impuso en la pista junto a su escudero Cabrera. Bravos, imponentes y veloces cuando las cosas se complicaron. Virtudes que hicieron que los velocistas llenaran a Chile de jubilo.