Tras el perdonazo de Reinaldo Rueda, "Turbomán" no le falló y anoche ante Japón encaminó a la Roja a una goleada: marcó dos veces que le permitió superar a Marcelo Salas como goleador histórico.
Cuando Eduardo Vargas jugó en el amistoso contra Haití disputado en La Serena, previo a viajar a la Copa América de Brasil, habían pasado 439 días sin tener a "Turboman" en la selección.
Una sanción de parte del cuerpo técnico tenía alejado a uno de los goleadores históricos de Chile, por lo que Reinaldo Rueda tuvo que darle vuelta a su regreso, ya que nunca quedó conforme con los que se atrevieron a ocupar su lugar.
Después de conversar, aclarar problemas y dejar todo en paz, el delantero de Tigres volvió a ser ese delantero letal que cuando se pone la camiseta roja no falla. Un gol en el amistoso contra Haití (2-1), mientras que anoche, en el estreno goleador por 4-0 ante Japón en Copa América, se anotó con dos conquistas (54' y 83'). Estaba todo escrito, nuestro Vargas estaba de regreso.
Fueron dos tantos que ayudaron a sumar en la boleta contra los asiáticos, pero también que agrandaron su historia dentro de la Selección. Claro, porque el nacido en Renca alcanzó los 38 goles con la camiseta de Chile, lo que lo hizo superar las 37 anotaciones que registró Marcelo Salas en su carrera, además de quedar a cuatro tantos de la cima que lidera Alexis con 42 (quien anoche también se anotó con una conquista; la otra fue de Erick Pulgar).
Eso no es todo para nuestro "Turbomán", porque en su registro por Copa América alcnazó los 12 tantos, lo que le permitió superar al peruano Paolo Guerrero como el jugador activo con más goles en el torneo, y quedó a cinco tantos de la marca de el argentino Norberto Méndez y el brasileño Zizinho, quienes lideran con 17 anotaciones.
Amigos recordaron que el Edu era el "rey de las salchipapas"
Antes de saltar a la cancha, Eduardo Vargas pudo compartir con sus "hermanos postizos", quienes le brindaron un hogar cuando llegó a Cobreloa.
Por eso, René, Felipe y Sebastián Castro lo acompañaron en la previa y contaron que "le hacía falta a la Roja, no teníamos gol".
Además contaron una anécdota: "En un local de Calama, Eduardo era el rey de la salchipapa y le ponía mayo, jajajá. El local ahora debe tener como cinco sucursales gracias a lo que comía él".
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