La modelo, según algunos medios argentinos, podría sufrir cáncer. Aún no tiene un diagnóstico certero.
Mauro Icardi acaba de completar una temporada espléndida en cuanto a números y a nivel. Después de dos años de naufragio en el Paris Saint-Germain, sin protagonismo y con la cabeza más en su relación que en el fútbol, por fin parece haberse reencontrado con su mejor versión. En el Galatasaray fue campeón, anotó 23 goles en 26 partidos y repartió ocho asistencias. El gigante turco, feliz de la vida, se propuso sacar la billetera: estaban —y están— dispuestos a cancelar cerca de 10 millones de euros por el pase del atacante argentino. Pero algo frenó repentinamente las negociaciones.
Su esposa, Wanda Nara, no la está pasando bien. En sus redes sociales, la maniquí y representante del futbolista, compartió un par de publicaciones que levantaron sospechas de todo tipo. “Algunos valores dieron mal”, informó mientras se dejaba ver hospitalizada. Algunos medios locales se arriesgaron a señalar que podría padecer algún tipo de cáncer. Sin diagnóstico definitivo de momento, lo único claro es que el deseo de Icardi es estar cerca de ella y sus hijos.
Por tanto, notificó TyC Sports, el centrodelantero busca equipo en Argentina. Sería, en principio, un préstamo de seis meses, y ya hay interesados:
Newell’s Old Boys es la primera alternativa en su futuro. La dirigencia de la Lepra se contactó informalmente con Icardi, sabiendo que el futbolista de allí surgió y que además es hincha, para preguntarle sus condiciones y hacerle saber su voluntad de sumarlo a sus filas.
De todos modos no sería el único: Boca Juniors, que sufre por el bajo rendimiento de Darío Benedetto y Miguel Merentiel, se arrojó a la búsqueda de un delantero de garantías. Y aun cuando se habla en Argentina de que entablaron negociaciones por Edinson Cavani, el citado medio no descarta conversaciones con el excapitán del Inter de Milan.
En los próximos días, y todo sujeto a lo que ocurra con Wanda, podría haber mayores novedades acerca del futuro de Icardi. De concretarse su regreso al fútbol argentino, sin dudas, se trataría de uno de los grandes golpes del mercado sudamericano.
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