El árbitro había cobrado penal para el “Mengao” y, en principio, era el “King” quien estaba a cargo de patear desde los doce pasos.
Corría el minuto 64 y Flamengo se imponía por 1-0 ante Cuiabá por la fecha 31 del Brasileirao. Arturo Vidal había entrado desde el inicio.
Fue en ese momento cuando cobraron penal para los locales y, por el “Mengao”, era el “King” quien estaba a cargo de patear desde los doce pasos, e incluso la hinchada carioca ya coreaba su nombre.
Sin embargo, el mediocampista de La Roja, destacado pateador de penales, decidió cederle la responsabilidad a Marinho, delantero brasileño que ha sido cuestionado durante la última parte del torneo. Vidal lo tomó de los hombros y alentó a la hinchada para que apoyara a su compañero.
Finalmente el mediocampista logró su cometido y fue su el artillero quien estuvo a cargo de rematar y poner el segundo tanto en el marcador, el que finalizaría con un 2-1.
“Necesitamos que todos los jugadores estén con la máxima confianza”, declaró el chileno a Globo Esporte tras el duelo. “Tenemos tres finales que van a ser muy importantes, así que estoy feliz por una persona tan buena como Marinho”, considerando que la liga ya entra en su recta final.
“En el primer partido de titular que jugué acá, él me dio un penal”, contó además Vidal, así que “ahora se lo devolví”.
En tanto, Marinho reveló: “La verdad es que Vidal estaba como el primer pateador y yo como el segundo, así que hablé con él y le dije ‘papi, ¿vamos a cambiar?’”.