“Todavía no termina, tenemos un partido, tenemos chances…, el que no cree, mala suerte”, sostuvo de igual manera el volante del Inter de Milán tras el compromiso.
Por segunda vez en fila Chile y su Generación Dorada están muy cerca de quedar afuera de un Mundial. Ayer, tras la dura derrota en el Maracaná por 0 a 4 ante Brasil, las opciones se redujeron a prácticamente un milagro. Nada pudieron hacer para evitarlo los héroes de los últimos años. Bravo, Medel, Aránguiz, Alexis y Vidal padecieron el encuentro y ninguno pudo encontrar su mejor nivel, el que suelen exhibir cuando se visten de rojo.
Por eso probablemente, más allá de que en la entrevista luego del partido mostrara el optimismo de siempre, el “King” abandonó la cancha del mítico estadio brasileño entre lágrimas. Mientras abandonaba el campo, el volante del Inter de Milán agradecía a los hinchas llorando, como captaron las cámaras. Por el juego y también de seguro por los golpes que sufrió durante el compromiso.
Luego, frente a los micrófonos, Vidal reconoció que “las Clasificatorias son muy difíciles, si no estás preparado, o no te concentras, te pasa la cuenta y eso nos está pasando ahora”.
Pero fue optimista hasta el final: “Todavía tenemos chances, tenemos un partido en casa, tenemos que descansar, prepararlo de la mejor forma y tratar de ganar el último partido y ver qué pasa, ojalá podamos clasificar”.
De hecho, consultado sobre si esta derrota ante Brasil suponía el final de la Generación Dorada, fue contundente: “¿Cómo es eso? todavía no termina, tenemos un partido, tenemos chances, el que no cree, mala suerte”.
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