Walid Regragui se mostró orgulloso, pese a la derrota en el partido por el tercer lugar ante Croacia. Y, por lo mismo, se la jugó…
El equipo revelación de Qatar 2022, no cabe dudas, fue Marruecos. El cuadro africano clasificó primero en un grupo que se percibía complicado, con Bélgica y Croacia como grandes favoritos, en octavos de final eliminó —desde el punto penal— a España y en cuartos hizo lo propio con Portugal, quitándole el sueño a Cristiano Ronaldo.
En semifinales, cuando ya habían hecho historia, transformándose en la primera selección de su continente en llegar a estar entre los cuatro mejores, cayeron frente a Francia.
Aun así tuvieron la oportunidad de jugar este sábado un inédito encuentro por el tercer lugar, y pese a la derrota y la decepción que conllevaba el resultado, el entrenador Walid Regragui dijo estar orgulloso por lo que demostró su equipo.
“Estamos decepcionados, pero mañana nos daremos cuenta de lo que hemos hecho. El escalón era demasiado elevado, para buscar el tercer puesto había que tener a todo el mundo al cien por ciento. Estoy orgulloso de mis jugadores, lucharon hasta el final”, sostuvo tras el partido contra Croacia.
“Cuando hagamos balance”, insistió el entrenador, “nos daremos cuenta de que estuvimos a un gran nivel, enfrentamos a grandes países. Solo tuvimos grandes partidos, mostramos que en África se trabaja bien, que nos acercamos”.
Y finalmente, se animó a dar un pronóstico de lo que ofrecerá el fútbol africano en algunos años:
“Francia y Croacia están por encima de nosotros, pero muy poco por encima. En quince años un equipo africano ganará el Mundial, vamos a volver a ganar experiencia”.