En su cuarto intento en el rally más rudo del mundo, el antofagastino está aperrando con su mamá y Fiorella, su sister que también es la nutricionista del equipo. Por ahora va cuarto en la general de las cuatrimotos. "Chaleco" López puntea en los autos ligeros.
En la vida siempre hay muchas oportunidades. Y Giovanni Enrico vaya que lo sabe. El piloto antofagastino ha sido una de las grandes sorpresas en el Dakar de este año, donde los corredores están tragando polvo en las dunas de Arabia Saudita.
A sus 33 primaveras, el "tano" llegó a liderar en esta ocasión la categoría de cuatrimotos, lo que es todo un mérito si se piensa que en las tres versiones anteriores ni siquiera logró cruzar la cuadriculada.
Pero lo más anecdótico de la carrera del ex estudiante de ingeniería Civil Industrial es que en esta aventura tuerca lo acompaña su familia. De hecho, en el Enrico Racing Team están su mami y Fiorella, su hermana que también trabaja como la nutricionista del hombre del casco.
Después de quemarse las pestañas combatiendo con los números en Viña, "volvió a Antofagasta y conoció las competencias, es muy determinado. Empezó a practicar y todo fue fluyendo. Mi papá le preguntó si se imaginaba en un Dakar. Mandó solicitud, quedó y se preparó para llegar", cuenta Fiorella, que ahora le prepara las papas en la aventura saudita.
Enrico come bueno
Aunque ayer Enrico llegó tercero en la quinta pata del Dakar 2021, lo que lo sacó por ahora del podio y bajó al cuarto puesto de la general, nada está perdido para el "puma" que descubrió la pasión por las motos a los 7 años, cuando su papi les regaló a él y su hermana una cuatrimoto, de la que nunca más se bajaron.
"Paseábamos en el cerro detrás de nuestra casa, mi mamá preparaba sándwiches y nos íbamos cerca de La Portada. Estábamos todo el día", recuerda Fiorella, quien nunca más se olvidó que su abuelita le tejió un pasamontañas a "Gio" para que no quedara todo empolvado y a lo "hombre araña" el cabro fue puliéndose sobre las dunas.
Lo importante es que por ñeque y esfuerzo, Giovanni no se va a quedar, al menos hasta lograr cruzar la meta lo que es su gran sueño, por ahora, en el rally más cabrón del mundo mundial.
Por eso, Fiorella está preocupada del más mínimo detalle y, sobre todo, de la dieta. Tras las carreras toma batidos de proteínas y come lo antes posible, cada noche tiene una comida previa a dormir.
Como avión. El que tuvo una nueva jornada feliz ayer en Arabia Saudita fue Francisco López, quien junto a su copiloto Juan Pablo Latrach se quedó con la quinta etapa que se disputó entre Riyadh y Al Qaisumah.
"Chaleco" completó los 456 km. de especial en 5H 46′32″ lo que le permitió sostener el primer lugar en la clasificación general de los vehículos livianos. Ahora el chileno lidera con una ventaja de 10′51″ del polaco Aron Domzala.