“Turboman” empujó al árbitro del partido y recibió la tarjeta roja en la eliminación de su equipo ante el Palmeiras.
Eduardo Vargas está en el ojo del huracán. Esto, tras la expulsión que sufrió este miércoles en la eliminación de su equipo, el Atlético Mineirio, a manos del Palmeiras, en los cuartos de final de la Copa Libertadores.
El partido estaba igualado 0-0 (2-2 terminó la ida) cuando el delantero chileno ingresó al terreno de juego, en los 79 minutos de partido. Sin embargo, cuando el cotejo ya expiraba, el jugador recibió la segunda tarjeta amarilla (la primera se la mostraron a los 82), y no pudo estar disponible para la tanda de penales.
Turbuman se fue antes de tiempo a las duchas tras el furioso reclamo que le propinó al árbitro del encuentro, Wilmar Rondán. De hecho, le aplicó un pechazo y un empujón, cuestión que llevó al colombiano a mostrarle la cartulina roja.
A la postre, el Mineiro cayó por 6-5 desde los lanzamientos de los 12 pasos y no pudo avanzar a la ronda de los cuatro mejores del torneo continental.
Entrenador en picada contra Vargas
Una vez finalizado el partido, el técnico de Vargas, Cuca, se mostró indignado por la actitud del delantero bicampeón de América con la Roja.
“Quiero evaluar bien la salida de Vargas, porque es un lanzador de penales. No hay explicación para que un jugador experimentado como él sea expulsado en un partido así”, avisó el estratega.
Incluso, advirtió que Edu podría recibir algún tipo de sanción por parte del club. “Quiero pensar para no perderme. Una cosa es que te dejes llevar por una necesidad y lo otro es que te vayas por tus quejas. No podemos aceptarlo”, lo remató.