Un particular situación se vivió en la tercera división del fútbol chileno, luego de que un jugador interrumpiera la entrevista que ofrecía su rival. De puro picado, dicen.
Esto ocurrió el sábado pasado, luego de que finalizara el encuentro que sostuvieron Alianza Huertos Familiares y Aguará, válido por la Tercera B del balompié nacional.
Jaime Torres, espigado delantero, estaba frente a los micrófonos y las cámaras de la transmisión. Minutos antes había sido uno de los protagonistas del partido: marcó dos de los tres goles, de modo que fue elegido el MVP.
Su cuadro, el Aguará, se impuso por 3 a 0 en condición de visitante a Huertos Familiares, de Til Til, logrando trepar hasta la quinta posición del Grupo Norte, con 24 puntos, a siete de los líderes, el Santiago City.
En tanto, el Alianza Huertos Familiares atraviesa una pésima racha y, con esta nueva derrota, se hundió en el último lugar de la tabla de posiciones, con apenas 4 unidades en 13 partidos jugados.
Solo así, por la rabia contenida, es posible entender lo que pasó después. Cuando Jaime Torres era entrevistado y mandaba saludos a su familia, en Valparaíso, un jugador del cuadro local avanzó, se acercó al micrófono y descargó toda su frustración:
—Erís entero malo, malo cu…
Torres sólo atinó a reírse. La entrevistadora, por su parte, lamentó lo sucedido: “Ahí la gente de Huertos Familiares mostrando…, bueno, perdieron, qué más podemos esperar de los comentarios. Una falta de respeto”.
Mira aquí el comentado momento:
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