El casildense sostuvo que “la FIFA determinó que se juegue (el Mundial) en un lugar donde no se debería haber jugado en una fecha en la que no se debería haber jugado. Todo es por plata, todo es un negocio”.
Este martes, en la previa del compromiso que sostendrá su Sevilla ante el Real Sociedad, último partido antes del parón por el Mundial, Jorge Sampaoli ofreció una conferencia de prensa que más pareció un descargo y que dejó varios títulos.
Todo comenzó cuando el DT fue consultado por el momento actual del equipo, que viene de igualar en el derbi ante el Betis, y qué estado de entendimiento llevan con su forma de jugar. Entonces, el casildense señaló que “nos falta contundencia en las acciones que tienen que ver con momentos de futbolistas que están cerca de un Mundial pensando en muchas cosas”.
“Estamos en medio de una tarea muy complicada en lo mental, porque lo del Mundial es inevitable. Esa cercanía genera a lo mejor no enfocarse del todo y se hace muy complejo para muchos equipos. En la condición en que estamos, para nosotros el miércoles es la final del Mundial. Si pensamos que es un partido para despedir a jugadores que van al Mundial es un error, mañana nos jugamos mucho”, agregó de inmediato.
En esa misma línea, le preguntaron al exentrenador de la “U” y La Roja que qué opinaba acerca de los rectores del fútbol, y Sampaoli fue contundente: “Estamos todos en ese lugar que les digo cuando hablo de la sociedad. Esta es la sociedad más estúpida de la historia. Está reflejado en el nacimiento de filósofos, artistas, músicos, una sociedad muy chata, que disfruta o se apuntala lejos del arte”.
“Se apuntala de este tipo de situaciones que usted comenta que son vacías, sin sentido, ni siquiera que alguien de un color u otro haga determinada cosa. Lo veo cada día, información que sale que no existe, no sabemos nunca qué información es real, no sabemos nada”, continuó.
Y concluyó: “En estos momentos es difícil ser parte de esto porque a mí me incomoda un poco, inclusive los medios de comunicación tienen una posibilidad que no han reflexionado. Son parte de todo este circo que se ve todo el tiempo”.
Finalmente, el “Sabio de Casilda” expresó en relación al certamen continental que “ahora no se puede quejar nadie, esto se tenía que haber resuelto antes. Jugar un Mundial en un país árabe en noviembre en medio de una competencia, parar la competencia y jugar... Ahora ya está, todo se ha aceptado, la FIFA determinó que se juegue en un lugar donde no se debería haber jugado en una fecha en la que no se debería haber jugado. Todo es por plata, todo es un negocio”.
“Como esto es un gran negocio y se deja por de lado todo lo demás, las consecuencias las pagan los de más abajo. Tenemos que empujar para saber que nos hacemos cargo de situaciones puntuales de unos futbolistas que por lógica, en todo el mundo, no van a mirar de reojo sino con los dos ojos al Mundial. No es culpa de los futbolistas”, cerró.