El extremo derecho, uno de los pocos rescatables este jueves, se enfrentó a los micrófonos y reconoció la tristeza del camarín. Quiere terminar con la frente en alto.
Muchos se preguntan por qué Joaquín Montecinos no tiene más minutos con la camiseta de La Roja, e incluso fue una de las consultas que tuvo que atender Martín Lasarte en la entrevista post partido: “Lo trajimos nosotros a la selección y fue transferido, ahora parece ser la resurrección del extremo derecho de la historia. No quiero cargarle una mochila pesada. Entró bien, tiene personalidad y es una posibilidad”, dijo el uruguayo.
Lo cierto es que el jugador del Tijuana de México volvió a demostrar que tiene de sobra para ser un estelar del combinado nacional y anoche, en Brasil, fue uno de los pocos que ofreció algo distinto. Apenas ingresó, generó la jugada del tanto que el VAR le anuló a Arturo Vidal.
Y también fue uno de los pocos que encaró a los micrófonos tras la terrible derrota. Allí, Montecinos se desahogó:
“Estaban haciendo un excelente primer tiempo los muchachos y el penal cambió todo. Ellos se soltaron, nos hicieron otro gol y estoy triste, estamos destruidos, se estaba haciendo un buen trabajo”.
Luego, en la misma línea, agregó que “veníamos con una ilusión muy grande. Hay que levantarse y terminar con la frente en alto, esta generación nos ha entregado muchísimo. Es lamentable, pero así es el fútbol”.
Para cerrar “con la frente en alto”, La Roja tiene una última chance, el próximo martes 29 de marzo, cuando se enfrente a su similar de Uruguay, que ayer abrochó su clasificación, en San Carlos de Apoquindo a las 20.30 horas. Una serie de resultados podría abrirle una puerta al repechaje a la Generación Dorada…