Aunque en breve el club de sus amores le hará un homenaje en vida, esculpiendo una estatua en el Estadio Monumental, el “Rey del metro cuadrado” sigue cargando con un dolor inmenso.
Por estos días los hinchas de Colo Colo viven su propio plebiscito. En efecto, hasta el viernes al mediodía, los forofos tienen la chance de escoger entre tres opciones; una de ellas será la estatua que se esculpirá en el Estadio Monumental en honor al histórico delantero de la institución, Carlos Caszely.
El tributo, por cierto, llega en un momento por decir lo menos delicado de la vida del “Rey del metro cuadrado”. Recordemos, el pasado mes de febrero, lamentó el deceso de su esposa, María de los Ángeles, a los 72 años.
Sobre esto, concedió una entrevista al sitio EnCancha. Allí explicó que, por desgracia, a raíz de la pérdida de su compañera aún se encuentra “muy complicado”.
“Estoy todavía con mi corazón muy débil, no quiero nada de nada, no quiero hacer nada, estoy en un momento muy complicado de mi vida. Más todavía para uno, que fueron 50 años de un matrimonio maravilloso, es mucho más complicado”, arrancó.
De hecho, luego sostuvo que “en este momento no le veo ninguna salida. Estoy con psiquiatra, que me está tratando de ayudar, de ver cómo salimos de esta cosa tan profunda, tan intensa y tan negativa”.
“Pero yo no le veo, de momento, ninguna salida, absolutamente nada. Como dicen en la tele: me fui a negro y no puedo salir”, completó.
Por eso, la estatua que se construirá como homenaje a su trayectoria es una caricia al alma. Y así también él lo percibe:
“Cuando me dijo (Edmundo) Valladares que querían hacer una estatua, lo primero que le pregunté fue: ‘¿Me voy a morir?’. Porque todas las estatuas las hacen después de muerto. Después de muerto uno es el mejor, después de muerto era muy bueno, después de muerto uno es todo”.
“Entonces”, continuó, “imagínate el orgullo que siento cuando me dicen que me van a hacer una estatua en vida, aunque queda un tiempo todavía para que la hagan, porque estoy en primera línea para irme para el otro lado. Es un motivo de orgullo muy grande que la puedan hacer antes que uno se vaya para el patio de los callados”.
Finalmente, consideró que el mecanismo que eligió el club para que los hinchas elijan la imagen que derivará en la estatua, “es extraordinario, no hay una imposición”. “Que lo hayan hecho así me parece muy bueno, muy interesante para que toda la gente colocolina sea parte de todo esto”, cerró.