En los últimos días ha ganado fuerza la idea de viajar hasta la montaña donde se perdió el rastro del chileno para tratar de ubicarlo ¿qué tan factible es? acá algunas respuestas y las posibles dificultades que se deben enfrentar.
Fueron 13 días de búsqueda con la muerte y el tiempo pisando los talones. Pero pese a los esfuerzos, el jueves 18 de febrero, el gobierno de Pakistán declaró muertos a los montañistas Juan Pablo Mohr, John Snorri (Islandia), y Muhammad Ali Sadpara (Pakistán), a quienes se les perdió el contacto cuando se disponían a escalar el último trama hacia la cima del K2, la segunda montaña más alta de la tierra (8.611 metros sobre el nivel del mar).
Desde entonces se ha discutido la idea de recuperar los cuerpos. Para ello, sería necesario preparar una expedición hacia la montaña, pero ¿es posible?
"Lo veo factible. Es muy romántica y hermosa la iniciativa de ir a buscar a Juan Pablo al K2. Estoy dispuesto a promoverlo", le comentó a EmolTV el experimentado montañista Mauricio Purto, uno de los primeros chilenos en hacer cumbre en el Everest en 1992.
Una posibilidad que también evalúan en el círculo cercano del chileno desaparecido. Hace unos días Federico Scheuch, primo de Mohr que participó en su búsqueda, confirmó la intención de volver al K2 para encontrarlo. "Queremos preparar una expedición para el verano, ahí es más fácil poder subir este cerro. Nuestra hipótesis es que están en el Cuello de Botella, que es muy alto, sobre 7.800 metros", señaló a Emol.
En general, se trata de una idea que entusiasma. "Podría ser factible. En Chile hay bastantes buenos montañistas que podrían hacer una cumbre", comenta al mismo sitio Juan Carlos Véliz, vicepresidente de la Federación de Andinismo.
Sin embargo, hay detalles que se deben sortear. "No sé si tan rápido como decir en seis meses más que llegará el verano de ellos. Para poder levantar una expedición de esa envergadura hay que considerar factores externos como la preparación física, aclimatación y que es un trabajo que se hace por lo general a lo largo de un año al menos", agrega.
Si la eventual expedición lograse ubicar el cuerpo, hay otro detalle que se debe salvar. "Bajar un cuerpo de esa altura no es fácil tampoco -añade Véliz-. A 7.800 metros el bajar el cuerpo se necesita ayuda extra. No es solo de los escaladores".