El volante del Cacique acumuló varios logros durante la temporada, pero también vivió un complejo momento.
Ya está todo encaminado para que a contar del próximo año, Carlos Palacios sea jugador de Boca Juniors, dejando un gran vacío en el esquema de Jorge Almirón. La Joya fue fundamental en la gran temporada del Cacique, siendo protagonista en el Campeonato Nacional y en la Copa Libertadores.
Sin embargo, no todo fueron alegrías para el jugador, ya que en octubre tuvo que enfrentar una dolorosa pérdida familiar que lo dejó sumamente golpeado. Uno de sus sobrinos falleció de forma trágica, su partida llegó en un momento complicado para el centrocampista, quien estaba en el centro de la polémica por su salida de La Roja.
El primer partido después del terrible incidente, fue ante Palestino, y según reveló Palacios, pensó en no jugar ese duelo ya que su estado mental no era el mejor. En conversación con Colo Colo TV, el volante abrió su corazón y señaló su momento más difícil en el club.
“Fue un momento complicado como familia. Había dormido poco, creo que nada. Una hora. Cuando fuimos a almorzar, pensé en decirle al profe que no podía jugar, que no me sentía preparado, que la mente no me estaba funcionando, el corazón no estaba funcionando. No había mucho ánimo, muchas ganas”, comenzó señalando.
Cambió de opinión al último momento
Tal y como señaló Palacios, “fue difícil tomar la decisión de jugar. Se suponía que me habían dado libre, que no viniera. Estaba en la casa, estaba acostado pensando. A él le gustaba verme jugar, disfrutaba de verme jugar. A veces llegaba a la casa y él ponía videos míos en YouTube, entonces estaba pensando y dije que lo iba a hacer por él”.
“Entrenábamos a las 16:00 y llegué a las 16:10. Bajé corriendo a entrenar y todos me quedaron mirando como ‘qué hace este aquí’. Fui a hablar con el profe (Jorge Almirón), me dijo que me apoyaba en cualquier decisión que yo tomara y le dije que quería jugar, que tenía las ganas de jugar. Lo demás ya es historia”, comentó.
En esta decisión Palacios no estuvo solo, ya que según relató: “le pregunté a mi hermana también si ella quería (que jugara el partido con Palestino) y ella me dijo que sí, que ella sentía que al niño le hubiese gustado. En ese momento tomé la decisión”.
“Saqué todo lo colocolino que soy y el amor por él. Que iba a ser un lindo día para él. Siento que todo lo que sucedió ese día fue por y para él, me siento con esa felicidad que le pude dar una alegría a él, que me estaba mirando desde el cielo”, cerró.