Carlos Zambrano reveló por qué salió con el rostro hinchado a jugar el segundo tiempo del partido contra Racing, la pasada fecha.
El pasado fin de semana se enfrentaron Racing Club y Boca Juniors en uno de los denominados clásicos del fútbol argentino. Fue un empate 0 a 0, que más allá de un par de polémicas arbitrales no tuvo demasiada acción. Sin embargo, lo que sí llamó la atención de todos fue que, cuando regresaron al campo de juego tras el entretiempo, dos jugadores del cuadro xeneize lo hicieron “tocados”.
En concreto, Carlos Zambrano y Darío Benedetto, dos de sus referentes, presentaban “marcas de guerra”, que dieron rápidamente paso a especulaciones sobre un eventual encontronazo en los camarines. El defensor peruano, por cierto, se llevó la peor parte: se le vio en el gramado con el pómulo hinchado, mientras que el delantero argentino apenas tenía un rasguño en la zona del cuello.
“Me confirman desde la seguridad que efectivamente hubo trompadas entre Benedetto y Zambrano, camino a los vestuarios una vez finalizado el PT de Racing - Boca”, señaló horas después el periodista Pablo Carrozza en Twitter. Y al día siguiente, el técnico de Boca Juniors, Hugo Ibarra, confirmó que hubo “una discusión”.
La trifulca se habría producido al interior de los camarines, luego de que, frente a las cámaras, Benedetto expusiera a sus compañeros: “Si nosotros estamos mirando cuando tiran los centros nos van a hacer un gol boludo”, los recriminó al finalizar la primera fracción. La tensión, desde ya, se podía cortar con un cuchillo.
Pero fue recién hace algunas horas que se supieron más detalles, cuando el defensor peruano rompió el silencio con el diario Trome de su país:
“Fue un guantazo, no me lo esperaba... Los compañeros nos agarraron de inmediato. En el camarín, él me pidió disculpas. Yo me contuve”, reveló Zambrano.
Y agregó: “No soy mucho de ver las noticias que se publican acá (en Argentina), prefiero estar tranquilo y no sé qué habrán dicho”.
Cabe destacar que los dos protagonistas fueron sancionados por el club. Juan Román Riquelme, vicepresidente de Boca Juniors anunció que los suspendieron por los próximos dos partidos: “Tuvieron una discusión, ahora es momento de reflexionar y nada más. Después, que pase en un partido es raro, porque son peleas que se pueden dar en un entrenamiento. En un partido te calentás más con el rival... Pero bueno, es el momento de que reflexionen”.
“Ellos tuvieron su charla luego del partido, también en el hotel, aclararon las cosas. Son gente grande. Esperemos que no se vuelva a repetir. Tomaremos más cuidados. Esperemos que no vuelve a ocurrir porque ellos son ídolos, deben ser profesionales todo el tiempo y los chicos del club copian…”, cerró.