La autoridad de gobierno tuvo que salir al paso de la polémica que se desató por la designación de un Happyland como sede de los Juegos Panamericanos.
La ministra del Deporte, Alexandra Benado, aclaró que es una sede que cumple con los requisitos y que no habrán cambios en ese sentido.
El lugar escogido generó molestia entre directivos de la disciplina y a su vez el enojo de algunos deportistas de la especialidad que catalogaron la sede como “una vergüenza”.
“Soy muy clara, el recinto elegido es un recinto visado por Panam Sports, por todos los equipos técnicos de la corporación de Santiago”, indicó la ministra.
“Entiendo las molestias, pero el diseño de estos Juegos no parte hace tres semanas y recién hace tres semanas recibimos la posibilidad de que el bowling tenga otra sede. Después de diseñar más de 40 sedes, no podemos a tres semanas cambiar todo, no todas las disciplinas van a tener un legado material, eso es una realidad”, finalizó.
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