El fútbol chileno tuvo su propio plebiscito: ganó el sí

Una verdadera "asamblea constituyente" se vivió en la sede de la ANFP en la jornada de ayer.

A ella asistieron los presidentes de las sociedades anónimas deportivas, varios capitanes y algunos entrenadores. Todos concordaron que el fútbol chileno necesita una nueva "carta magna".

Pero antes de llegar a dicha conclusión, los asistentes participaron de un "plebiscito" donde se preguntaba por la continuidad el torneo y la opción "sí" ganó por amplia mayoría.

"Vamos a hacer nuestros mayores y mejores esfuerzos para retornar a la actividad, entendiendo que las demandas sociales no rivalizan con nuestra actividad", anunció el patrón del peloteo, Sebastián Moreno.

Claro que el regreso tiene algunas condiciones. La más relevante es que por razones de seguridad, no se partirá con el duelo entre Universidad Católica y Colo Colo en San Carlos.

Para ello, se acordó que todo se retoma en la duodécima fecha de la segunda rueda, o sea, los albos reciben a Coquimbo, la UC hace lo propio con Audax y Universidad de Chile visitará a Huachipato, entre otros encuentros.

Con esto se logran dos cosas: que se juegue en estadios privados los duelos más trascendentales y así no se repita el bochorno de La Pintana, y que una de las principales barras (Los de Abajo) no se concentre en Santiago.

Seguidores que ayer no fueron invitados al encuentro, pero que si fueron nombrados por sus participantes. "Los invito a que establezcamos una suerte de diálogo sin violencia, sin soberbia, sin vergüenza, con mucha valentía, que nos apoyen a todos", reflexionó el mandamás de Azul Azul, José Luis Navarrete.

Manifestaciones y plazos. También se estableció que no se impedirán las manifestaciones pacíficas en los recintos deportivos y que los jugadores podrán portar lienzos en apoyo a la causa popular, realizar minutos de silencio por las víctimas de los agentes del estado y paralización del juego (no tocarán la pelota en los primeros minutos de cada encuentro).

Por último, se dijo que no se descarta jugar a mitad de semana, hacer reuniones dobles ni alterar el orden de las fechas. Es que la idea es terminar el torneo antes del 26 de diciembre, pues es el último plazo que les dio la Conmebol para inscribir a los clubes chilenos en duelos internacionales (Libertadores y Sudamericana).