Desde la transmisión sin derechos del Pato Torres para Radio Corazón hasta la fiesta privada que casi termina en pelea. La Cuarta recopiló diez sabrosas historias de quienes presenciaron la final del Lipton International Players Championships de Miami, donde Marcelo Ríos derrotó al legendario André Agassi y se convirtió en el mejor tenista del mundo.
A Don Francisco casi se lo llevan preso
Acompañado de su esposa "Temmy" Muchnik y de Jorge Ríos, Don Francisco vio la final con Agassi desde uno de los palcos.
Entusiasmado y luego de celebrar el segundo set de Ríos, que para la posteridad fue un contundente 6-3, el icónico animador chileno sacó su cámara de video y comenzó a grabar.
Pero al ser un rostro reconocido por los estadounidenses, bastó que un guardia creyera que estaba grabando sin derechos y quiso llevarlo detenido.
Luego de un minuto de tensión, Don Francisco explicó que era personal, aunque ante la insistencia del guardia tuvo que dejar de inmortalizar el momento.
La celebración casi termina a combos
Después de ganar el torneo, Marcelo Ríos y su entorno cercano fueron hasta el restaurante Linda B. Steakhouse a cenar. Desde ese lugar, aún recuerdan aquella noche.
"Recuerdo algún tipo de altercado en los pasillos yendo a los baños, porque un tipo borracho molestó a Marcelo y la cosa se puso caliente. Afortunadamente todo se calmó rápido y no llamaron a la policía", relata un testigo del altercado.
A Patricio Torres lo hicieron callar todo el partido
Aprovechando que estaba en Miami trabajando en "Sábado Gigantes", al actor Pato Torres le pidieron desde la Radio Corazón que relatara la final del "Lipton" y lo mandaron con un celular de la época, de esos que parecían ladrillos.
Aunque no tenía acreditación, Don Francisco le consiguió una entrada con el papá del "Chino" y a pesar de sus pocos conocimientos de tenis despachó por teléfono.
"La gente me hacía callar todo el rato. No tenía idea lo que hacía, pero igual grité puntos ganándome el odio de muchos en la tribuna", recordó el Pato, que nunca más se acercó al tenis.
Sole Bacarreza quedó "realmente cansada"
La temporada 98 fue maratónica para Ríos y también para el área deportiva de Canal 13, que transmitió todos sus partidos en el circuito.
Dentro de los rostros habituales estaba Soledad Bacarreza, en ese entonces con 28 años, que generalmente compartía set con Patricio Cornejo, quien por estar en Argentina preparando una serie de Copa Davis, le dejó el partido con Agassi a Jaime Fillol.
"Ese día vivimos una jornada muy bonita por el triunfalismo novedoso, pero terminé muy pero muy cansada. Había seguridad que era una transmisión histórica y era el 'premio gordo' para todos en el canal, no sólo para Marcelo", explicó la comentarista.
La bandera era de una hincha chilena
El periodista y escritor del libro "El Extraño de Pelo Largo", Nelson Flores, fue el reportero que siguió a Ríos por todo el mundo desde que era junior.
Por eso el 29 de marzo del 98, era un viejo conocido en el ambiente. De ahí que Jorge Ríos, papá del "Chino", le aleteara desde un palco para que consiguiera una bandera chilena y se la bajara a su hijo en el último juego.
"No tenía ninguna, así que me puse a buscar entre la barra nacional, hasta que una señora a regañadientes me la pasó, aunque no quería porque decía que como habían tantos chilenos no se la iban a devolver. Nunca supe si regresó a ella, pero vimos al Chino celebrando con la bandera para todo el mundo", recordó Flores.
Agassi nunca imaginó que fuera tan bueno
André Agassi era 31° hace 20 años. A pesar de eso, llegó confiado a la final del Lipton, pero tras el partido confesó que se encontró con un torbellino.
"Tienes que hacer cosas desde el principio del punto para ganarle a Ríos. No juega como alguien de su estatura, saca muy bien. Nunca pensé que volveríamos a ver a un jugador tan bueno como Marcelo después de Michael Chang. Trae otra dimensión al tenis", contó hidalgamente tras la derrota.
Autor de libro sobre el "Chino": "Inspiró a Federer"
El periodista estadounidense Scoop Malinowski escribió un libro sobre Marcelo Ríos ("El hombre que apenas conocíamos").
Confeso admirador de su juego, relata que el día que llegó al número 1 "Marcelo le dio vida al estadio, a los aficionados chilenos los electrizaba".
Además, asegura que "los años de gloria de Ríos siguen vivos. Jugadores de hoy como Yoshihito Nishioka, Donald Young, Alexandr Dolgopolov, Su-wei Hsieh y también Roger Federer me dijeron que estaban inspirados por Ríos. Muchos grandes jugadores son olvidados, pero Marcelo Ríos no se olvida".
Iván Núñez terminó mojado en una pileta
El ahora rostro de noticias de Chilevisión, Iván Núñez, en ese entonces era un joven reportero de prensa del 13 y le tocó seguir a Ríos por el mundo. Y para el día final su misión era captar la celebración de los chilenos en Miami.
Con tanta efervescencia, un grupo de hinchas lo vio despachando y lo tiró a una pileta.
"Quedé empapado y eso que estaba en vivo. Era felicidad pura de los chilenos que hasta hicieron caravana en Key Biscayne", rememoró Núñez, que días después abrochó la primera entrevista con Ríos siendo número uno del mundo.
"Ahí me confesó muchas cosas. Se abrió y como siempre, me trató bien. Incluso, en el aeropuerto de vuelta a Chile nos topamos y me dijo que no sabía si ir a La Moneda al homenaje del Presidente Eduardo Frei, pero terminó asistiendo igual", remató.
El "yogurt de mora" vio llorar a Massú y González
Una semana después del Lipton, Ríos debía viajar a Buenos Aires para sumarse al equipo chileno de Copa Davis.
Allá lo esperaban Hermes Gamonal, Nicolás Massú y Fernando González. Estos últimos, según palabras del mítico encordador Exequiel Carvajal, vieron el triunfo del "Chino" por la tele en un hotel bonaerense y no ocultaron sus sentimientos.
"Quedaron muy emocionados. Para ellos fue importante ver que su compañero era número uno. Indudablemente, fue algo que marcó sus carreras al igual que al tenis chileno", cerró el "Yogurt de Mora".
Robinson Gamonal fue su amuleto
No era su entrenador, pero sí su amigo cercano y compañero de generación. Por lo mismo, el ex tenista Robinson Gamonal no tuvo problemas para acompañar a Ríos por Roma, Hamburgo, Roland Garros, entre otros torneos.
"Yo trabajaba en la Academia de Nick Bollettieri y ahí concidimos. En eso quedamos que andaría con él en Miami. Ya en el partido de cuartos con Thomas Enqvist, nos dimos cuenta que estaba para ser número uno. El partido con Agassi fue el broche de oro y lo dominó de principio a fin", recordó Gamonal.
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