Después que Alejandro Burzaco abrió su gran boca, los dirigentes de toda Sudamérica temblaron. Todos, menos Harold Mayne-Nicholls, quien fue dejado como una blanca paloma por el ex director de Torneos y Competencias.

En el inicio del juicio por sobornos en Estados Unidos, Burzaco, que a estas alturas bien ganado tiene el apodo de "Bursapo", no dejó títere con cabeza.

Pero Harold no sólo no apareció entre los que metieron las manos al cajón. De hecho, figura en el grupo de los honestos.

"FUE NOBLE"

"Se agradece lo de Burzaco, a quien no conozco personalmente. El tipo fue noble, porque bien podría haber dicho lo contrario", admitió el ex "Lord" de la Anfp a La Cuarta.

Sobre el sistema de trampas en la Conmebol, Mayne-Nicholls dijo que "nunca vi algo raro, nada de sobornos ni nada parecido. Esto es como los perros, primero se huelen para saber con quién están tratando. Por eso nadie me ofreció algo cuando yo iba a las reuniones".

Asimismo, el rubio natural explicó que no le extraña que el nombre de Sergio Jadue, su sucesor en el sillón de Quilín, saliera tantas veces al baile en el testimonio de "Bursapo".

"No me llama la atención, no me extraña lo de Jadue por su ritmo de vida. Se notaba que estaba en cosas raras", sapeó el antofagastino.