Constanza Ríos fue ovacionada por los asistentes a la exhibición de Marcelo Ríos y fue una de las más solicitadas para las selfies de rigor.
Lo ganó casi todo como tenista. Fue número uno ante que los argentinos y los brasileños. Su nombre se transformó en leyenda. Pero a Marcelo Ríos le faltaba algo. Y no precisamente la ordinariez que le pidió a los periodistas a comienzo de este año.
El ex top one deseaba que sus seis hijos lo vieran jugar. Es que Constanza, Isidora, Colomba, Marcelo, Agustina y Antonella nunca pudieron disfrutar en vivo del talento que lo transformó en el chileno más grande del circuito ATP.
Por eso, Marcelo estaba feliz. Y así lo demostraba en su ingreso a la cancha del Monticello, donde jugó un amistoso con ecuatoriano Nicolás Lapentti. "Es una emoción muy grande que mis hijos chicos me vean jugar y que sepan realmente lo que hizo el papá, esto les va a quedar grabado en la memoria", aseguró el "Chino".
Luego agregó que sólo la mayor, la hija de su primer matrimonio con Guiliana Sotela, lo acompañó a un torneo (el Abierto de Australia el 2002), pero "era muy chica".
Y fue precisamente esta niña la que ayer se robó todos los aplausos. Ya con 17 años y una incipiente carrera de modelo, recibió todos los regaloneos del público que asistió al casino.
De hecho, fue ovacionada cuando bajó de la pieza que tiene en el hotel hasta donde estaba instalada la cancha. Habitación que es una de las más cara e incluso tiene acceso a una piscina privada. Claro que eso no era lo importante anoche, ya que vestida de blanco y negro y con una simpatía que debe haber heredado de su madre, accedió a todas las selfies que los asistentes le pidieron.
Y así se entretuvo hasta que comenzó la exhibición, donde ambos deportistas mostraron por qué fueron animadores del circuito en los años '90 y se dieron el lujo de bromear con Nicolás Massú que comentaba el partido para TVN.
Y fue precisamente "el hombre que no conoce la palabra imposible" quien dio la gran noticia de la noche. Es que Massú conoce a los organizadores del challenger de Punta del Este (21 al 27 de enero) y ellos le entregarán una invitación a Marcelo para que pueda volver a las canchas.
Cabe recordar que Ríos intentó jugar el torneo de Ohio (Estados Unidos), pero le negaron la wild card y parecía que su deseo sería truncado. Sin embargo, su destreza es inmortal.