Jan Oblak y Renan Lodi se dijeron de todo tras una jugada que casi termina con un gol en contra. Tuvieron que meterse sus compañeros para que no pase a mayores.
Aunque a fin de cuentas el Atlético de Madrid se impuso por 2 a 0 en su visita al Elche, y aprovechó la paridad del Sevilla para asaltar el tercer puesto de La Liga a dos fechas del cierre, no todo fue miel sobre hojuelas para los dirigidos por el “Cholo” Simeone. Por el contrario, en la primera fracción, cuando aún el marcador estaba en cero, el cuadro local —en el que jugó el zaguero nacional Enzo Roco— contó con una chance clarísima para adelantarse.
Fue a los 14 minutos cuando, tras un córner servido desde la izquierda, el delantero argentino Lucas Boyé cabeceó completamente solo. Por suerte, para las aspiraciones del Atleti, su disparo se fue desviado, pero el golero de los colchoneros, Jan Oblak, no se lo tomó para nada bien.
De hecho, apenas salió la pelota, buscó a su compañero, Renan Lodi, para recriminarle por la facilidad con que había cabeceado el artillero rival, que además se trataba del hombre al que debía marcar.
Lodi, por cierto, no se quedó callado y hubo un cruce bastante picante. Al punto de que tuvieron que intervenir sus compañeros para separarlos.
Incluso, Oblak se quedó bien caliente hasta el final de la primera fracción. Como captaron las cámaras, tuvo que acercarse Luis Suárez, otro que suele ser de mecha corta, para hablarle y tranquilizarlo.
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