“Recibió una institución sólida en lo administrativo, en lo financiero sin deudas, y muy potente en lo deportivo. Hoy, la U luego de salvarse del descenso en las últimas tres temporadas, está endeudada, sin fútbol joven y un plantel con muchos jugadores que nunca debieron vestir la camiseta azul”, disparó.
En enero de 2015, José Yuraszeck decidió dar un paso al costado y vender todas sus acciones a Carlos Heller. Estuvo prácticamente seis temporadas tomando decisiones, desde la comisión de fútbol e inclusive como presidente, en el cuadro que tanto ama. Alternó buenas y malas, aunque él suele mencionar apenas las buenas: haber sido parte del cuerpo dirigencial que entre 2009 y 2013 consiguió el primer tricampeonato del club y la Copa Sudamericana. Se fue en silencio, y permaneció así, salvo contadas excepciones, durante un largo tramo, como esperando. Y fue ahora, luego de otra campaña para el olvido, salvada in extremis, que el empresario se aprestó a hablar sobre la Universidad de Chile.
En conversación con La Tercera, explicó que ese partido ante La Calera, el que los azules dieron vuelta sobre la hora para mantenerse en primera, “fue una verdadera pesadilla”.
“Lo vi en un Ipad, en Dalcahue. Si uno se acordaba de las últimas 12 fechas, que habían sido de terror, esta no tenía por qué cambiar. El equipo no venía jugando a nada, jugadores atemorizados y sin un gran espíritu de lucha”, relató Yuraszeck, quien pronto admitió que “veía muy difícil salvarse. Después del segundo gol de La Calera el panorama era más que negro”.
Al respecto, el expresidente de Azul Azul sostuvo que “los últimos tres años han sido muy malos, los peores de la historia de la U, y tienen un máximo responsable: Carlos Heller”.
“Recibió una institución sólida en lo administrativo, en lo financiero sin deudas, y muy potente en lo deportivo. Hoy, la U luego de salvarse del descenso en las últimas tres temporadas, está endeudada, sin fútbol joven y un plantel con muchos jugadores que nunca debieron vestir la camiseta azul”, argumentó.
Y luego insistió en que “las decisiones de administrar un club y armar un equipo nunca deben estar en manos de una persona. La comisión de fútbol que presidí por cuatro años se reunía todas las semanas, las decisiones se tomaban en forma colegiada. Nunca decidía el presidente del club o el de la comisión de fútbol, todas las decisiones se tomaban luego de largos análisis y debates”.
Otro de los temas que el empresario lamenta es el del fútbol joven. “Es la única forma de ir sacando jugadores de recambio que alimenten al primer equipo. Vendiendo alguno de ellos se puede financiar la formación de los que vienen. Todo esto fue desmantelado por Heller y los resultados están a la vista”, explicó en la entrevista.
Finalmente, consultado por alguna posibilidad de regresar al club, Yuraszeck se restó: “La U necesita gente joven, profesionales que le dediquen mucho tiempo al club. Es tiempo de otros”.