La próxima semana se definirán los detalles, partiendo por la opción de "bonificar" a los clubes de los potreros.
Con Wanderers masticando la rabia por la decisión del Consejo de Presidentes, ayer se empezaron a tirar líneas de lo que ocurrirá el próximo año en Primera y la "B", siempre que el ambiente en Chile se calme.
¿Superliga? No, señor. Lo que está claro, por ahora, es que habrá dos torneos, con 16 equipos en cada división. Ni uno más, ni uno menos.
La sorpresa, que algunos interpretan como una compensación para las escuadras de los potreros que prácticamente jugaron 27 amistosos en el año, es que cómo mínimo en 2020 habrá tres ascensos al fútbol de honor (y la misma cantidad de descensos, of course), mientras que aún es materia de estudio si se aplicará una bonificación a los equipos de la "B".
"La próxima semana se van a discutir las bases del torneo, pero sí se acordó el número de equipos que subirán", explicó Rodrigo Robles, el gerente de competiciones de la Asociación Nacional de Fútbol. Pero ojo, que también existe la posibilidad de que se rajen con otro "medio cupo". El próximo viernes quedará definido.
En cuanto a la clasificación a los torneos internacionales, el criterio se mantendrá como hasta ahora, y el propio Robles explicó que la opción de aplicar un coeficiente de rendimiento "no es descartable. Los escenarios que se presentaron incluían ponderaciones, pero hoy no era el instante de analizar las fórmulas".
Así, el torneo nacional, que no tiene para cuándo armar el fixture, comenzará el 24 de enero, cinco días después de la disputa de la Supercopa entre la Católica y el ganador de la Copa Chile.