El manacorí se dejó ver frente a sus fanáticos en muletas, todavía muy dolorido tras el certamen francés que lo coronó el pasado domingo.
Rafael Nadal nuevamente hizo historia en Roland Garros. Tal como spoileara en los cuartos de final de 2008 Nicolás Almagro, cuando dijo que el manacorí seguiría ganando el certamen francés hasta que tenga 65 años, este domingo aplastó a Casper Ruud —que venía siendo el mejor sobre arcilla desde 2020— y levantó por decimocuarta vez la copa de los mosqueteros. Fue su título número 92 en el circuito ATP y, por cierto, el Grand Slam 22, su segundo en la temporada tras ganar Australia, sacándole dos de diferencia a Novak Djokovic y Roger Federer.
Sin embargo, pese a la histórica victoria, a medida que transcurría el torneo, el español fue dejando algunos mensajes que prendieron las alarmas. Al punto de que, para muchos, el domingo anunciaría su retiro. Por suerte, no fue así: “No sé qué pasará en el futuro, pero continuaré luchando para seguir el mayor tiempo posible”, dijo con la copa en la mano. Y luego, ante los medios confirmó que se someterá a un nuevo tratamiento para mitigar los dolores de su pie: “En las condiciones actuales, no puedo y no quiero seguir jugando hasta encontrar una solución”.
La incertidumbre, sin embargo, se instaló luego de que se divulgaran unas imágenes de Rafa, tras el torneo, en muletas, sin poder siquiera pisar con el pie izquierdo. Un escenario que claramente pone el signo de pregunta a su participación en el siguiente grande de la temporada: Wimbledon.
A propósito, ¿cuál es la lesión de Nadal? El manacorí padece desde hace años el síndrome de Müller-Weiss, una alteración en el desarrollo de su hueso que suele producirse en la infancia, pero que se manifiesta en la adultez. “No tiene cura y lo que vas a buscar es quitar el dolor”, afirmó el doctor Antoni Dalmau, jefe de la unidad de pie y tobillo del Hospital Asepeyo San Cugat.
¿Qué puede hacer, entonces, Rafa? Apenas seguir tratamientos para “ayudar a disminuir la sensación en el pie” y “quitar esa sensación de dolor tan permanente”.
“Estaré allá si mi cuerpo me lo permite. Wimbledon es una prioridad, los Grand Slam son una prioridad. Jugarlo con antiinflamatorios sí, con inyecciones de anestesia no”, dijo hace algunos días Nadal, consultado por los dolores.
Temas Relacionados
