¿Conservaría Giannis Antetokounmpo su trono de MVP? ¿Aguantarían los jóvenes Grizzlies la última plaza de playoffs? ¿Se impondría Lebron James o Kawhi Leonard en la batalla de Los Ángeles?
La suspensión indefinida de la NBA por la pandemia del coronavirus ha dejado muchas preguntas en el aire que solo encontrarán respuesta una vez que se retome la temporada, aunque este es un escenario que ni la propia NBA es capaz aún de asegurar.
En medio de la gran incertidumbre que vive Estados Unidos, con sus deportes parados, la NBA apenas avanzó la semana pasada que la suspensión durará al menos un mes, un plazo que se espera que amplíe después de que las autoridades sanitarias recomendaran evitar eventos con más de 50 personas durante los próximos dos meses.
Con los equipos preparándose para un eventual retorno a mediados o finales de junio, según reportó ESPN, estas son algunas de las dudas deportivas que se mantendrán hasta ese momento:
¿Conseguirá Antetokounmpo su segundo MVP?
La estrella griega era considerado el gran favorito. No solo por unas estadísticas personales estratosféricas (29,6 puntos, 13,7 rebotes y 5,8 asistencias por partido), sino por ser el líder absoluto de un equipo, los Milwaukee Bucks, con el mejor balance de victorias y derrotas (53-12) y que llegó a soñar con alcanzar los 70 triunfos, una meta ya casi inalcanzable tras el bajón del equipo en marzo.
Tras el de 2019, sería el segundo premio MVP (Jugador Más Valioso) para Antetokounmpo a sus 25 años, una edad en la que estrellas como Stephen Curry, Kevin Durant o Kobe Bryant no habían sumado ninguno y Lebron James y Michael Jordan tenían uno.
Por detrás del griego en los pronósticos están Lebron James (Los Angeles Lakers), James Harden (Houston Rockes) y también Luka Doncic (Dallas Mavericks), el fenómeno esloveno que en su segunda temporada ha situado a su equipo en zona de playoffs y firmado unos inesperados 28,7 puntos, 9,3 rebotes y 8,7 asistencias por partido.
A sus 35 años, Lebron se metió en la pelea por el quinto MVP de su carrera con un espectacular último mes y medio, redondeado con el último fin de semana de la liga en el que derrotó tanto a los Bucks como a Los Angeles Clippers de Kawhi Leonard.
¿Ganará Lebron o Kawhi la 'Batalla de Los Ángeles'?
Cortejado por los Lakers para conformar un trío galáctico con Lebron y Anthony Davis, Kawhi decidió en el verano boreal escribir su propia historia firmando por el vecino Clippers, que le trajeron de escudero a Paul George.
Todos los focos de la liga se pusieron en la ciudad californiana para ver qué equipo, y qué superestrella, se impondrá en la batalla de los playoffs.
El tiempo corre en contra de Lebron (Kawhi es siete años más joven), comprometido a brindar el anillo de esta temporada a la memoria de Kobe Bryant.
Un posible recorte en el número de partidos de la temporada también podría afectar a Lebron en su persecución de los máximos anotadores de la historia de la NBA.
'King James' superó en marzo los 34.000 puntos en toda su carrera y sigue a la caza de los dos primeros: Karl Malone (36.928 puntos) y Kareem Abdul-Jabbar (38.387).
¿Dará caza Zion a Morant?
Una de las grandes sorpresas del año ha sido el rendimiento de los Memphis Grizzlies, equipo al que se vaticinaba una larga reconstrucción tras el fin del proyecto liderado por Mike Conley y Marc Gasol.
Con grandes aciertos en los últimos drafts, los Grizzlies se han recuperado en tiempo récord y de la mano de sus jóvenes Ja Morant y Jaren Jackson Jr., y veteranos como el lituano Jonas Valanciunas, estaban situados en playoffs en el momento de la suspensión.
Por detrás, sin embargo, venían los New Orleans Pelicans que, impulsados por Zion Williamson, se encontraban a 3,5 partidos de los Grizzlies.
El ala-pívot novato, número 1 del pasado draft, irrumpió con fuerza en la liga en enero, pero, al haberse perdido los tres primeros meses de competición por lesión, no se espera que pueda quitarle el premio al Novato del Año a Morant.
¿Funcionará el experimento de los Houston Rockets?
Conscientes de su inferioridad respecto a los favoritos al título, los Houston Rockets decidieron en febrero apostar por una inédita estrategia de 'small ball' (sacrificar jugadores altos por otros más veloces y tiradores) traspasando al único pívot con el que contaban, Clint Capela.
La apuesta total al liderazgo de James Harden y Russell Westbrook y el acierto de sus lanzadores no ha dejado por ahora un resultado concluyente. Houston inauguró el arriesgado plan con seis victorias consecutivas, a las que le siguieron cuatro derrotas también seguidas.