Todavía no dirige oficialmente en el West Ham y ya tiene su primera polémica.
Es que el inicio de Manuel Pellegrini en los "Hammers" no ha sido nada de fácil. El ex entrenador del City sabe que para pelear en la parte alta de la Premier necesita romper el chanchito para renovar una plantilla que la temporada pasada se salvó apenitas del descenso.
Por lo mismo firmó su llegada al cuadro inglés con la exigencia de poder gastar en jugadores que potencien el equipo. El primer fichaje ha sido el inglés Ryan Fredericks (25) y que fue clave en el ascenso del Fulham a primera división.
Presupuesto limitado
Pero más allá de eso, el West Ham no ha podido cumplir con las exigencias de Pellegrini. El ingeniero hasta reconoció que por el limitado presupuesto de 80 millones de dólares, no podrá contar con ninguno de los seleccionados nacionales que pidió.
"Traté de llevarlos (a Vidal y Sánchez), pero en ese entonces el City estaba castigado por el fair play financiero y fue imposible. Yo feliz me los llevaría a mi equipo, pero ahora por un tema económico es imposible... Llevar a Bravo al West Ham tampoco es viable", señaló Pellegrini en una reciente charla realizada por El Mercurio.
Tras ello los medios The Sun y Mirror han recalcado que el estratega no estaría nada contento con la administración de David Sullivan, el máximo accionista del club.
Tanta preocupación habría generado que ya se estaría pensando en aumentar el presupuesto para darle en el gusto a Pellegrini.