Diego Maradona y su día de histeria: "Nos tomamos todo el vino"

Durante toda la participación de Argentina en el Mundial, Diego Armando Maradona ha hecho noticia por sus comentarios y comportamiento en los palcos. Aunque en el infartante duelo de ayer ante Nigeria, con triunfo y clasificación para la Albiceleste, el Diego simplemente se lució.

Para bien o para mal, cada acción del ex campeón del mundo de México 86 y vicecampeón en Italia 90, dio que hablar ya que pasó por todos los estados posibles para un ser humano en un estadio. Por lo mismo, su imagen se convirtió en millones de "memes" en todas las redes sociales, siendo tendencia en todo el mundo.

La primera instantánea cayó en su llegada al Estadio Krestovski cuando fue ovacionado por la hinchada y abrió sus brazos haciendo el "Cristo", aunque se fue tan adelante en el palco que debió ser sujetado por uno de sus asistentes, sino corría riesgo de caer.

Luego, aprovechó que una nigeriano pasó a sus aposentos a sacarse una selfie y se puso a bailar con ella. Incluso, le dio una "vueltita" con la cara llena de risa. De ahí no paró más.

Cuando Lionel Messi sacó el derechazo cruzado que abrió el marcador para el elenco trasandino (14'), Diego simplemente enloqueció. Tras gritar más que su gol a Grecia en Estados Unidos 94 se le ocurrió cruzar sus brazos en el pacho al estilo de una "momia", puso los ojos blancos y agradeció hacia el cielo.

Luego empezó a gritar que Argentina "tiene huevos, tiene huevos" a los hinchas de otros países que lo estaban molestando, cuando el equipo de Messi no podía abrir el marcador.

Con tanta euforia y la lluvia de emociones, "Memeradona" cayó rendido en uno de los asientos de palco y se durmió. Como si fuera un bebé.

Antes de terminar el primer tiempo, un hincha se acercó con su celular para grabar un saludo de "Maradó" y comenzó a gritarle "sos campeón del mundo", burlando la seguridad.

Parándose a duras penas y entendiendo muy poco, Maradona miró a la cámara levantando su pulgar derecho haciendo un "me gusta" con los ojos desorbitados.

Sin parar

Pero el día de locura marcó su máximo rating cuando cayó el gol de Nigeria y sufrió burlas de los fanas cercanos a su palco. El Diego se contuvo de responder, pero guardó su ira por si caía el gol que daría la clasificación a Argentina a segunda ronda.

Por eso, a cuatro minutos del final, cuando Marco Rojo tomó el centro de Gabriel Mercado y clavó el tanto el triunfo, "D10S" se convirtió en un energúmeno.

Gritó desaforadamente, abrazó a un cercano y luego se fue hacia adelante gritando "gol putos, gol putos", levantando sus dos dedos del medio a quien se le cruzó.

Aunque el "show" final, y mientras los jugadores liderados por Lionel Messi celebraban su paso a octavos de final, llegó cuando Maradona tuvo que ser sacado entre dos efectivos de seguridad desde el palco hasta uno de los salones VIP del coloso de San Petersburgo, porque se encontraba en un deplorable estado físico e incapaz de sostenerse.

Tan mal se encontraba que tuvo que ser revisado por los paramédicos de la organización, quienes determinaron que estaba descompensando y sufrió un alza de presión, por lo que dieron una agüita.

"Quiero contarles que estoy bien, que no estoy ni estuve internado. En el entretiempo del partido con Nigeria me dolía mucho la nuca y sufrí una descompensación. Me revisó un médico y me recomendó que me fuera a casa antes del segundo tiempo, pero yo quise quedarme porque nos estábamos jugando todo. ¿Cómo me iba a ir? Les mando un beso a todos, perdón por el susto y gracias por el aguante, hay Diego para rato", comentó Maradona.

"Dónde estábamos nosotros servían solamente vino blanco. Nos tomamos todo el vino, sí, pero ahora estoy hablando con vos. Yo estoy contando la posta, otra cosa es que se invente", reveló.

Casi una hora después, Maradona se sintió mejor gracias a la atención médica y pudo salir caminando sin ayuda del estadio, para poder tomar un vuelo a Moscú.

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