El nombre de Marcelo Espina está grabado en el ADN del fútbol chileno. Luego de bajar cuatro estrellas con Colo Colo y despedirse del balompié el 2004 también en nuestras tierras.
Por eso basta que aparezca un jugador de apellido Espina para que se enciendan las alarmas buscando un parentesco con el "Calamar".
Esa búsqueda por fin dio frutos, ya que Deportes Copiapó, de la Primera B, anunció que Santiago Espina, hijo del mítico "8", se convirtió en su nuevo delantero y carta de gol hasta diciembre de 2018, gracias a un préstamo con opción de compra.
"Santi" proviene de Platense, donde estaba militando en el equipo reserva. Y si bien era considerado en las nóminas, finalmente sus ganas de venir a Chile, el país donde nació, fueron más grandes.
Contento
Como su padre está chocho con el nuevo paso futbolístico (antes fue el paso desde las inferiores de San Lorenzo a Platense), fue el mismo quien le ayudó a instalarse en la capital de la región de Atacama.
, comentó Espina padre a La Cuarta, aclarando que su príncipe no estará en el partido ante San Marcos en Arica, programado para el próximo sábado a las 22:00 horas.
Con respecto a lo futbolístico, el "Cabezón" aconsejó a su heredero y le dio alas para grabar su propio nombre. "Empezará una historía nueva. Que será la historia de él. Estoy feliz y espero que todo salga bien. Lo bueno es que vino a un lugar tranquilo, que era algo que buscaba. La idea fue empezar de a poco, en un lugar con gente que lo trata bien", cerró el también comentarista de ESPN.