Martín Rodríguez sorprendió al mundo con su mascota exótica

"Lindorfo" Jiménez aclara que en Chile está prohibida su tenencia.

Las historias de Instagram dejan, a veces, imágenes que vale la pena atesorar, pues sólo duran 24 horas y de ahí se las traga un hoyo negro tipo Stephen Hawking.

El último caso fue el de Martín Rodríguez, seleccionado nacional que vive en Ciudad de México. Gracias a que la policía tuitera nunca falla, no faltó el que "pantalló" una imagen donde se ve al "Tín" jugueteando con un simpático monito en una habitación.

Mientras el macaco se equilibra en una tele, el delantero de Pumas de la Unam ríe y lo trata de tomar. Todo en una imagen que entretiene, pero también deja dudas.

¿Se puede tener a un primate de mascota? La respuesta es un gran "depende", aunque Sebastián "Lindorfo" Jiménez advierte que en Chile "no habría ninguna posibilidad. Desconozco cómo será la ley en México, pero acá está absolutamente prohibido".

Mucho cuidado

Martin-01.jpg

La fascinación por los monos, según el ex animador de "La ley de la selva", es ancestral. "Como son animales muy parecidos al ser humano, a la gente le encanta cómo nos copian y se encariñan", dice.

Pero el veterinario glamoroso da las gracias a que nuestro país "está suscrito al Cites (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres)", que regula el comercio de animales y plantas silvestres y, por el cual, "acá nadie podría llegar a tener un mono como mascota".

- ¿Qué monito es el que se ve en la foto del "Tín", Sebastián?

- Se trata de un mono ardilla o saimiri sciureus, que está protegido en casi todo el mundo.

- ¿Se ve simpático?

- En general lo es. Es un monito ágil, juguetón, que pesa un poco más de un kilo. Pero lo malo es que para conseguir uno hay que matar a su madre.

- Chuata, cómo tanto...

Martin-02.jpg

- Los saimiri son gregarios y se crían colgados a la espalda de su madre, por lo que hay que matarla para sacarlos.

- ¿Son difíciles de criar?

- El gran problema es la comida, porque en la jungla comen bichos y hojas. Pero en cautiverio comerían lo mismo que nosotros, como galletas y hasta carne, entonces les da diabetes muy rápido.

COMPARTIR NOTA