La leyenda del boxeo busca devolverle la mano a su público a través de su fundación y ya inició una campaña de donaciones. "Los abuelitos quieren meterse al ring, se sienten jóvenes", indicó.
Las cosas como son: Martín Vargas cumplirá 65 años en enero, pero sus puños de acero ya los quisiera Fernando de Paul para despejar en el instante preciso al infinito y más allá. Y ese talento, además de la fortaleza física y mental, decidió compartirla con los más necesitados a través de su fundación, que se constituyó formalmente hace un par de meses.
¿El objetivo? "Trabajar en programas de acción social para grupos vulnerables, sin descartar el boxeo competitivo", contó el ingeniero Carlos Hernández, mientras que Cristian Salas, sicólogo deportivo y ex campeón sudamericano, destacó la importancia de la campaña de "donación por recompensa".
Se trata del sitio www.catapulta.me, donde la gente y las empresas pueden hacer sus aportes, considerando que el primer objetivo es trabajar en tres focos (entrenamiento físico, meditación y masoterapia) con la Liga Chilena contra el mal de Parkinson. Además, ya han hecho pruebas con tatitas con Alzheimer.
"Lo que más deseo es devolverle la mano a la gente que sufrió y gozó cuando yo boxeaba. Es un orgullo, ojalá que la gente sepa que estoy haciendo esto para ayudar, no para robar. Le di mucho prestigio a este país, y me pagaron con moneda de dos caras, pero yo quiero responderle a la gente humilde, sencilla", explicó la leyenda del boxeo.
- No es menor trabajar con abuelitos...
Así es, por lo general están olvidados. Viejitos hay muchos, me incluyo, voy a cumplir 65, pero parezco un cabrito de 20. Ellos quieren practicar, meterse al cuadrilátero, se sienten jóvenes, y eso me pone feliz. Quiero que la gente que está en sus últimos años lo pase bien.
- Aparte hay todo un tema con la salud en estas personas con Parkinson y Alzheimer...
Claro, yo he visto cómo entran y cómo salen, casi rehabilitados, acá botan tensiones, el estrés. Tenemos estudios que demuestran que el entrenamiento básico del boxeo ayuda a mejorar la coordinación, el equilibrio y la fuerza.
- ¿Y algunos agarran papa?
Jajajá, que quede claro que es a nivel recreativo, lúdico. No les vamos a poner los guantes para que peleen entre ellos. Es que esto no es sólo un combate, te preparas física y mentalmente. Y la idea es que pueda estar en contacto con la gente, contar historias, estar en clases y en charlas.