El relator, como de costumbre, la rompió toda con su relato en redes sociales.
De seguro el elemento que distingue a Alejandro Lorca de otros relatores, y que a propósito hizo de él uno de los favoritos del respetable, es su creatividad: cada tanto, suele condimentar sus narraciones con alguna frase sobre el acontecer nacional, y sin discriminar, inclusive si hace falta echando mano a la farándula criolla. Su repertorio, por caso, presume de alusiones al robo de computadores desde el Ministerio de Desarrollo Social pero también al look de Vesta Lugg en la gala de Viña o a las visiones de Kenita Larraín. De ahí que en redes sociales se forjara una comunidad, los Lorcadictos, “que recopila las mejores frases de #ElMejor relator del mundo”.
Como sea, Lorca anoche, en el epílogo del Cobreloa contra Audax Italiano, lo volvió a hacer. Con ochenta y nueve minutos en el reloj, Thomas Rodríguez tuvo en sus pies el cuarto tanto en la sorprendente victoria a domicilio del elenco floridano, pero increíblemente erró un mano a mano por los pelos.
Entonces, el relator se despachó: “Para afuera, ¡para no creerlo! Corrió sesenta metros con balón dominado. Puso primera, segunda y tercera, llegó a la quinta y también a la sexta. Golpe con borde interno, pierna derecha, el balón que se pierde ancho. En un contragolpe más peligroso que monja con maleta”.
Esto último, claro, una referencia al caso que estremeció al país hace unos días, cuando una monja dejó una maleta con un cuerpo en la comuna de Ñuñoa. Se trataba de los restos de su amiga, con quien había pactado acompañarse para siempre.
Mira aquí el momento:
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