El lateral respondió con tres dardos a las declaraciones del presidente de Blanco y Negro.
“Lo único bueno del partido es que sacamos los tres puntos”, dijo —medio en broma, medio en serio— Arturo Vidal al rato, cuando hablaba del alcance de la lesión que le impidió seguir contra Unión Española, y con eso de seguro también aludía a la riña del final que acabó con cuatro expulsados o, por qué no, a su inesperado cruce con Maxi Falcón. Lo que no sabía el “King” es que poco después, su frase cobraría todavía mayor sentido.
Con un par de semanas de mercado por delante, los flashes buscaron a su siguiente protagonista, el presidente de Blanco y Negro Aníbal Mosa, para consultarle lo que ahora importa: la llegada del lateral derecho, la última petición del DT que se ha dilatado más de la cuenta. Entonces él, con un vistoso gorro chilote y algo parecido a la decepción, arrancó un discurso contra Mauricio Isla, —¿hasta anoche?—, el favorito en las quinielas: “Como les dijo el gerente deportivo, nosotros le hicimos tres ofertas y las tres fueron rechazadas, así que nada, estamos viendo otras alternativas en este momento”.
“La señal que da es que no quiere venir, eso es lo que imagino”, insistió enseguida. “Cuando uno rechaza tres ofertas y a todas las propuestas que mandamos dice que no, entendemos que no le interesa”.
El asunto es que todo esto llegó a oídos de Isla y el “Huaso”, por supuesto, no se quedó de brazos cruzados, al contrario. “Increíble cuando quieren quedar bien, impresionante”, sostuvo de entrada, con bastante ironía, en una historia de Instagram. Con Mosa y los micrófonos de fondo, continuó: “Primero que pedí 70 millones, segundo que pedí 60 millones, tercero que pedí 50 millones y ahora que no quiero ir jajaja, más respeto”.
Así cerró el bicampeón de América: “Milagro que juego al fútbol para los hinchas y para la familia… no para los dirigentes”.
¿Se cae definitivamente el pase?