Maximiliano Tagle es el presidente de una agrupación de hinchas de la "U" que está dispuesta a costear la construción del soñado recinto azul.
Desde el fracasado plan de la Corfuch en los '80, pasando por la Ciudad Azul de René Orozco, hasta el ficticio reducto en la Laguna Carén.
Larguísimo ha sido el historial de frustraciones en Universidad de Chile por la construcción de un estadio propio. Negativas municipales, alto costos y falta de terrenos, son los principales portazos en la cara que han recibido los hinchas azules a lo largo de los 91 años de historia que tiene el club.
Por lo mismo, desde la iniciativa de los fanáticos, se creó una agrupación llamada "Todos queremos un estadio para la U", que busca la construcción de éste, autofinanciada por los mismos fanáticos.
Maximiliano Tagle es el presidente de esta entidad, que durante meses se ha reunido con abogados para buscar la creación de una organización sin fines de lucro.
"Queremos brindarle al hincha una mayor transparencia y que sepa que todo marcha en un marco regulatorio correcto. Sobre todo cuando hablamos de temas financieros. Nuestra idea es que la mayor parte del dinero del estadio y los terrenos sea financiada por los hinchas", señaló a La Cuarta.
El mayor problema que hoy frustra la obtención de una casa propia para la "U" es la falta de terrenos. En ese sentido, desde la agrupación ya trabajan en la búsqueda de un espacio que reuna esas condiciones. "Estamos barajando opciones. Tenemos que cambiar la imagen que se tiene de un estadio. Su construcción no es sinónimo de violencia. Nuestra idea es trabajar en conjunto con la comunidad y brindarles a ellos un valor social, áreas verdes, etc", afirmó.
Por último, Maximiliano se refirió a los dichos de Carlos Heller, máximo timonel de Azul Azul, quien en entrevista con el diario La Tercera, reafirmó el compromiso de la construcción. "Nosotros tenemos que creer en la dirigencia. Es un objetivo común y estamos dispuestos a ayudar", cerró.