La polola del "Jirafo", María Laura Urruticoechea, subió una foto a Instagram luciendo la mansa roca de enamorados, justo cuando el raquetero sufrió la dolorsa caída de 900 puestos en ranking ATP por doping.
Fue a comienzos de 2018 cuando Nicolás Jarry sacó su mejor derechazo y, disfrazado de galán, flechó a María Laura Urruticoechea (24) en un carrete junto a unos amigos.
Entre talla y talla, la estudiante de ingeniería comercial en la Universidad de Los Andes quedó encantada con la personalidad del tenista, quien a la hora de encarar se mostró canchero y decidido a quebrar el servicio de la joven.
Luego de un par de meses juntitos, Jarry oficializó su relación con María Laura en sus redes sociales, cuando los tortolitos subieron una foto en Kitzbuhel (Austria), ciudad donde el Nico jugaba un torneo ATP.
Por esos días el nieto de Jaime Fillol vivía los mejores momentos de su carrera, situación muy distinta a la que sufre en la actualidad, quien luego de ser sancionado con 11 meses por un doping positivo bajó cerca de 900 puestos en el ranking raquetero.
Jarry tendrá que levantarse como el Ave Fénix para intentar volver a situarse entre los mejores 50 tenistas del mundo, y para ello ahora cuenta con una doble motivación, luego que ayer su polola subiera a Instagram una foto portando el manso anillo de compromiso, el paso previo para pisar el palito en un casorio.
"Y existen esas personas que llegan a tu vida y te la cambian para siempre", colgó en sus redes la enamorada María Laura, junto a una foto que llega a dar envidia de pura felicidad.
Así al Nico le suenan las campanas de boda, a la espera de un regreso con tutti al circuito ATP.