El ex futbolista reconoció que dejó el alcohol y las malas juntas para erradicarse en el campo de Putaendo.
Nunca es tarde para enmendar el camino. Así al menos es el caso de Jorge "Kike" Acuña. El ex futbolista, que protagonizó varios amoríos (entre ellos tres casamientos y tres separaciones), se encuentra alejado del ambiente de la noche. Incluso, confiesa que "hace tres meses que no tomo nada".
La carrera del jugador iba en ascenso cuando fichó por el Feyenoord, en 2003, y era titular indiscutido en la Roja de todos. Sin embargo, las malas juntas lo llevaron por el mal camino. De hecho, esto generó que su trayectoria fuese en declive.
Incluso, el formado en la UC hasta fue detenido por conducir en estado de ebriedad. Por lo mismo, decidió hacer un cambio en su vida. "Sufrió mi mamá, la Carla (Jara), la Roxana (Muñoz), sufrió gente que me quería. Me arrepiento de no haber sido más en el fútbol", confesó en entrevista a Las Últimas Noticias.
Tanto ha sido el giro en su vida que dejó de lado el alcohol. Un tema que lo acomplejó a lo largo de su carrera. "Dejé de tomar. Hace tres meses que no tomo nada. Soy el único futbolista que se chantó después del retiro (...) En la época discotequera. Me pagaban 800 lucas solo por ir a una disco. Iba con amigos y a ellos los llenaban de copete. Todo gratis. Y hacíamos muchos tongos porque eso me servía para que hablaran de mi y me persiguieran", confesó.
Consejero
Erradicado en el campo de Putaendo, el calvo jugador ahora pasa sus días junto con su pareja Daniela Urbina. La prevencionista de riesgos ha sido clave en el cambio del ex seleccionado. Tanto que "Kike" hasta se aventuró en aconsejar a las actuales figuras de la Roja.
"Antes me gastaba $1.800.000 en un almuerzo (...) Regalé siete casas a amigos. Tenía tanta plata que cuando veía gente sufriendo en la tele, la llamaba y ayudaba. Por eso Arturo Vidal o Alexis Sánchez tienen que asesorarse bien y que no gasten plata en tonteras", recalcó.
Proyectos
La relación con su actual pareja no ha sido fácil. Daniela, que actualmente trabaja como contratista agrícola, vivió una delicada situación que se produjo cuando se sacó la muela del juicio y esta herida se infectó.
"Casi me muero, estuve desahuciada y pase varios días en coma (...) Jorge no me dejó sola en ningún minuto", recalcó la joven.
Ahora Daniela se enfoca en su recuperación acompañada del Kike. Todo esto para comenzar pronto su mayor objetivo como pareja: poner una distribuidora de gas. "Mi idea es poner fuera del portón un mono con mi cara vestido de futbolista que diga Kike Acuña Lipigas", cerró Kike Acuña.
"Él quedó sin nada de puro generoso (...) Perdimos una guagua y esperamos que cuando me recupere podamos hacer familia, que saque sus estudios y podamos construir nuestra casita", remató Daniela.