El West Ham del "Ingeniero" derrotó por 3-1 al Manchester United, lo que dejó en la pitilla al DT portugués, quien hace algunos años había ninguneado feo al chileno cuando asumió en Málaga.
El 2011, cuando Jose Mourinho había reemplazado a Manuel Pellegrini en el Real Madrid, el portugués barrió el piso con el DT chileno, quien recién había asumido en Málaga.
La frase que quedó para la posteridad fue "si el Real Madrid me echa no voy al Málaga, sino a un grande". Eso dejó al "Ingeniero" con la vena hinchada, y admitió años después que "tuve problemas de fondo con Mourinho".
El destino los unió ayer en la Premier League, donde los "Diablos Rojos" visitaron al equipo de Don Manu, quien celebró la ausencia de Alexis Sánchez en la lista de citados de José Mourinho.
"Fue una sorpresa la ausencia de Alexis. Fue un alivio para nosotros porque ellos tienen jugadores decisivos en el tercio final", celebró Pellegrini, quien lleva siete unidades en el torneo.
Apenas cinco minutos se demoró el equipo londinense en desnivelar el duelo gracias a un gol de Felipe Anderson, uno de los grandes fichajes del entrenador nacional para esta temporada. A los 43' un desafortunado autogol de Victor Lindelof mandaría el partido 2-0 a favor de los locales en el entretiempo.
El DT portugués golpeó el tablero haciendo ingresar a Marcus Rashford, quien convirtió el descuento para el equipo de Manchester (71'). Marko Arnautovic a quince minutos del final pondría el golpe final para Mourinho, de quien ya se especula una posible salida tras la crisis que vive su equipo.
"Fue un gran partido porque recuerdo lo que dije hace tres semanas, cuando estábamos perdiendo partidos, que debíamos jugar como un equipo grande, y creo que hoy lo reflejamos", destacó el técnico nacional, quien consiguió su cuarta victoria frente al entrenador del United, registrando además tres empates y siete derrotas.
"Hoy jugamos como me gusta que mis equipos jueguen: como un equipo grande que intenta llegar a la otra área. Anotamos tres goles y perdimos un montón de oportunidades en la segunda mitad", reconoció.
"Siempre hemos confiado en nuestro trabajo. Estamos mejorando y los resultados están llegando", concluyó Pellegrini luego de servirse un plato que frío es más rico: la venganza.