La selección, por cierto, aseguró su clasificación a cuartos de final donde se medirá a Marruecos.
Una grave acusación realizó la selección chilena de talla baja en medio de su participación en el primer Mundial de la categoría, que se celebra por estos días en Buenos Aires, Argentina.
En concreto, luego del compromiso que los enfrentó al combinado local, y que acabó con una fea derrota por cuatro tantos a nada, el equipo nacional lamentó en sus redes sociales que “los jugadores se dirigían al camarín, cuando uno de los argentinos comenzó a insultarlos”.
“Uno de nuestros jugadores reaccionó ante esta situación queriendo detenerla y llega un tipo correspondiente a la barra argentina y lo zamarrea”, continúa el relato de los pormenores. “Varios jugadores chilenos quisieron detener la acción”, sin embargo, “al mismo tiempo, el jugador argentino número 14 lanza una botella hacia el público chileno, impactando a un familiar en su pecho”.
“No hay que olvidar que en nuestra barra había bebés, niños, niñas y familia en general, ya que es sabido que es una instancia para disfrutar en familia y no para la violencia”, acotó La Roja de talla baja en la publicación.
La parte más grave viene a continuación: “Uno de nuestro jugadores reacciona a este acto y, por atrás de este jugador que lanza el botellazo, sale el jugador argentino número 13 y le pega un cabezazo a un jugador chileno, dejándolo con las piezas dentales superiores sueltas y parte de su tabique nasal comprometido”.
“El cuerpo técnico argentino cubrió y avaló estos lamentables actos, escondiendo y defendiendo a sus jugadores”, cierra el texto.
En otra historia, publicada en Instagram, los miembros de la selección solicitaron registros de los incidentes a quienes estuvieron presentes para formalizar las denuncias.
Aquí la acusación:
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