La excampeona mundial arremetió esencialmente contra dos ejecutivos muy cercanos a Vince McMahon.
Our fight se llama la autobiografía de Ronda Rousey, histórica campeona del peso gallo de la UFC y tres veces campeona mundial de WWE, que saldrá a la venta el próximo 2 de abril.
La luchadora de 37 años se comprometió a entregar allí un relato pormenorizado de su paso por ambas promociones, y a modo de adelanto, en una reciente entrevista con Never before told —luego publicada en su cuenta de Instagram— dedicó duros epítetos contra dos de los históricos “lugartenientes” de Vince McMahon, Bruce Prichard and John Laurinaitis, y a propósito aclaró sus sentimientos con respecto a la compañía:
“Pueden irse a la mierda, en serio. Lo único que realmente me frenó fue el número de palabras que se me permitía tener en este libro. Por contrato teníamos 90.000 palabras y yo iba a decir mucha más mierda, especialmente sobre John Laurinaitis y Bruce Prichard. Pero nuestro editor dijo que teníamos que racionalizarlo todo y no dar un rodeo en la búsqueda de joder a estos viejos bastardos”.
Laurinaitis, exmano derecha de McMahon, fue despedido en algún momento de 2022, precisamente en medio del escándalo que sacudió al histórico empresario. De hecho, fue mencionado en la denuncia de tráfico sexual y abuso que propició la renuncia de Vince a WWE y TKO, aunque él de momento trata de desmarcarse y asegura haber sido una víctima más. Prichard, en tanto, continúa desempeñándose en la promoción a pesar de la presión mediática.
Más tarde, a modo de cierre, Rousey elogió a Paul Levesque —nombre real de Triple H, exluchador, actual encargado creativo de WWE—, aunque fue prácticamente el único. Después volvió a la carga, revelando de paso que no tiene intenciones de regresar al mundo de la lucha libre profesional:
“No pueden sostener la espada sobre mi cabeza y tenerme como rehén con mi propia carrera. No necesito nada de ellos y no tengo intención de volver, así que puedo decir todo lo que pienso y siento, mientras todos los demás que todavía están cautivos de su organización no pueden”.
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